Máquinas

El enano que creció y se hizo eléctrico

MINI SE Countryman ALL4 es la versión mejor acabada y ecológica de este ya no tan pequeño inglés que con sus 224 caballos de potencia se convierte en todo un SUV

FOTOGRAFÍA: AUTO EXPRESS
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Hace ya mucho que MINI dejó de ser un micro carro, y la mejor muestra de que la legendaria marca británica busca nuevos derroteros es la segunda generación del Countryman, un verdadero todoterreno que nada tiene que envidiar a sus pares de mayor tamaño.

La versión 2017 de este pequeño gigante trae muchos cambios, entre ellos un cuerpo que gana 20 centímetros de largo y 3 de ancho para convertirlo en el MINI de producción en serie más grande fabricado hasta ahora. Aunque indudablemente sigue siendo un MINI, su figura deja atrás la acostumbrada redondez de líneas y se hace más cuadrado, condición que le aporta un aire de todoterreno. Por lo demás conserva la amplia parrilla de doble tramo, los grandes faros y el inconfundible look inglés de la marca, aunque con el agregado de unas molduras sobre las ruedas y barras de techo que matizan su condición de rústico.

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En el interior, las variaciones son obvias: ahora pueden viajar en la parte trasera dos personas de hasta 1,85 metros con total comodidad, y al volante el conductor de gran tamaño no tendrá que ir con el cuello encogido. El maletero también gana bastante espacio, más por no contar con caucho de repuesto, sustituido por un kit para pinchazos.

Donde sí ha habido un cambio importante es en motor. Si bien Countryman dispone de una completa gama que va desde los propulsores de tres y cuatro cilindros diesel y a gasolina, la verdadera estrella es el nuevo híbrido enchufable: un tricilíndrico de 136 caballos adosado a un eléctrico de 88 caballos que en conjunto aportan 224 CV, más que suficiente para impulsar a este ya no tan pequeño SUV.

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El resultado de esta combinación no es nada despreciable: sin intenciones de ser un deportivo ni nada parecido, ambos motores permiten a este pequeño pasar de 0 a 100 km/hora en tan solo 6,8 segundos y llegar a 198 km/hora de velocidad de punta. Ah, y en modo totalmente eléctrico la autonomía es de 40 kilómetros, suficiente para el recorrido diario interurbano sin gastar una gota de combustible.

Los propulsores están unidos a una caja de cambios automática Steptronic de seis velocidades, y el motor eléctrico ubicado en eje posterior aporta condiciones propias de una tracción total. De cualquier manera, cuenta con un sistema de tracción mejorada y autónoma que reconoce el tipo de terreno y se adapta en todo momento.
¿Extras? Varios: de serie viene con control de crucero con función de frenado, sistema multimedia de radio Visual Boost y MINI Connected, ópticas LED, climatizador y llantas de aleación de 17 pulgadas.

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