El primer mandatario afirmó que esta zona militar especial, que ya estaba bajo el amparo de las Regiones Estratégicas de Defensa Integral (REDI), protegerá a todos los municipios mineros. No detalló si también preservará los yacimientos que están siendo explotados ilegalmente fuera de la Corporación Venezolana de Minería C.A. (Minerven).
Aseveró que luego del lanzamiento del Arco Minero, hace una semana, «se solucionarán estructuralmente las irregularidades» -como la explotación ilegal- en las minas de oro y diamantes de la región.
A pesar de que afirmó que desconoce el resultado de las pesquisas, dijo que el informe preliminar establece que la posible matanza ocurrió en el marco de una guerra entre bandas criminales.
Su discurso coincide con el del gobernador oficialista del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez. Insistió en que los cuerpos de seguridad del estado protegen a los familiares y al grupo de mineros.
Maduro afirmó que «informaciones preliminares» a partir de los testimonios recogidos por la comisión presidencial enviada a Tumeremo a investigar los hechos, hablan de «una posible matanza, en una guerra entre bandas» .
«Todo parece indicar que fue un grupo paramilitar», estimó.
«En el momento en el que escuché a los diputados de la oposición inicié una investigación. Hablé con la Fiscal [Luisa Ortega Díaz, le pedí al Defensor del Pueblo [Tarek William Saab] a que se fuera a establecer la verdad», añadió.
Por otro lado, afirmó que los rumores de que militares y funcionarios policiales estaban involucrados en el presunto asesinato son «politiquerías baratas, suciedad y maldad» impartida por la oposición. «Si es cierto [que fueron masacrados] que sucedió, nos duele a toda Venezuela», sentenció.