Venezuela

Monseñor Moronta: "Solo Maduro y Duque pueden reabrir la frontera"

Exhorta a ambos presidentes a reunirse, superando diferencias, para lograr una reapertura que acabará con el negocio de las trochas e incentivará inversiones. Puntualizó que, cuando esto se logre, debe cambiarse a todo el personal militar de las fronteras

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Moronta
Cortesía

Monseñor Mario Moronta sabe que todo lo que se haga en favor de reabrir la frontera es importante. Pero también tiene claro que son los representantes de Venezuela y Colombia quienes deben reunirse para dialogar y fijar las bases para la apertura de los puentes internacionales que unen a los dos países.

“El problema de la apertura de la frontera no lo va a resolver un representante del gobierno con los gremios productivos de la zona. Está bien que se reúnan, es positivo, pero quienes tienen que venir a la frontera (con escoltas porque ambos tienen miedo), son Nicolás Maduro e Iván Duque”, dijo el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana.

Si realmente están al servicio del pueblo tienen que sentarse a hablar, establecer las reglas del juego y, sin insultos, buscar la solución al problema y abrir los pasos legales.

«Es necesaria la participación de garantes o acompañantes en una eventual reunión entre Duque y Maduro, para acordar la medida de apertura. Los acompañantes pueden ser de la iglesia, un interlocutor del gobierno, representantes empresariales y si se requiere la presencia de un garante internacional, se busca», precisó.

“Les garantizo que el encuentro será efectivo. Con esa reunión se acabará el negocio que hay en las trochas. Y por fin podremos utilizar el puente binacional de Tienditas. Esto también incentivará las inversiones”, aseguró el obispo.

Negociar es la clave

Para monseñor Moronta, la ruptura de las relaciones diplomáticas entre ambos países y el desconocimiento del gobierno colombiano a Maduro como presidente de Venezuela, representa un problema para el dialogo para la apertura de la frontera. Sin embargo, dice que “aun manteniendo esa actitud, tienen que negociar”.

El gobernador del Norte de Santander, Silvano Serrano, y el representante del gobierno de Maduro en el estado Táchira, Freddy Bernal, pueden tener la disposición y encuentros con empresarios, pero el problema no está centrado en San Antonio–Cúcuta. «El problema es Venezuela y Colombia», explicó.

“A algunos no les gustará mi propuesta, sobre todo a los dirigentes de oposición, pero quiero decirles que hay que pensar en el lado humano. Dejemos los insultos a un lado y construyamos vías para una frontera como la que siempre se había tenido, de integración”.

Agregó monseñor Moronta que no se puede continuar justificando lo injustificable y «haciendo ver como legal» la ilegalidad.

«Los gobiernos, tanto de Colombia como de Venezuela, saben que las trochas existen. Ninguno de los dos son bobos. ¿Van a seguir permitiendo que la gente tenga que pagar a alguien para poder cruzar de un lado al otro de la frontera?”, preguntó.

Según informaciones suministradas por fuentes no reveladas por monseñor Moronta, el pago generado por el uso de pasos ilegales entre Venezuela y Colombia, asciende a millones de dólares mensuales, tanto para los de un lado como los del otro.

“¿Los gobiernos colombiano y venezolano acaso no saben de estos pagos? Claro que lo saben, pero les conviene”, puntualizó.

Recomendó que una vez que se concrete la apertura de frontera entre Venezuela y Colombia, lo primero que debe hacerse es cambiar a todo el personal militar. También puntualizar que, en las funciones de los civiles, no deben  inmiscuirse los militares.

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