Cultura

Caracas en Contratiempo descubre el legado inédito de Aldemaro Romero

El próximo 28 de julio la Orquesta Juvenil de Chacao, bajo la dirección de Florentino Mendoza, rendirá homenaje al creador de la Onda Nueva, en el marco del festival anual de música que muestra el mejor rostro de Caracas.

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Fotos: William Padrón

Por cuarto año consecutivo se llevará a cabo el Festival Caracas en Contratiempo y dentro de las actividades pautadas se encuentra el homenaje al maestro Aldemaro Romero, creador de la Onda Nueva, el próximo jueves 28 de julio a las 7:00 pm, en el Teatro Chacao del Centro Cultural Chacao.

La Orquesta Juvenil de Chacao, dirigida por Florentino Mendoza, ejecutarán las piezas inéditas «Carnaval llanero» y «Joropo a millón», así como la obra «Merenguazo», que ha sido tocada una sola vez por el mismo Aldemaro en el año 2007. Adicionalmente estará el Trío Aldemaro Romero, integrado por Miguel Siso (cuatro), Eduardo Betancourt (arpa) y Rodness Medina (bajo).

Ese mismo día, previo al este espectáculo musical, la eximia trayectoria del maestro Aldemaro Romero será tema de un conversatorio en la Sala Experimental del Centro Cultural Chacao, de Caracas a las 4:00 pm.

Elizabeth Rossi de Romero, su viuda, junto al maestro Alí Agüero, la cantante Zenaida Riera y Betsimar Díaz, grandes amigos y seguidores de Aldemaro, hablarán de su relación con el artista homenajeado. Este encuentro es de entrada libre.

Preparativos siguen en proceso

Florentino Mendoza revisa los score en su oficina, recibe a la señora Elizabeth Rossi de Romero, ambos intercambian anécdotas. Por primera vez se sientan a conversar sobre estas obras que serán expuestas en el Teatro Chacao.

La Elizabeth tiene una gran memoria y detalladamente habla de los procesos y momentos en los que Aldemaro Romero solía sentarse a componer. Florentino oye con detenimiento, descubre que aún existen otras obras que desea ejecutar próximamente, se compromete a revisarlas y llevarlas a cabo.

El director de la Orquesta Sinfónica de Chacao y la viuda de Aldemaro acceden a intercambiar impresiones en una entrevista en la que, más allá del venidero espectáculo producido por Guataca Producciones, dejan abierta la posibilidad de seguir hurgando en la obras inéditas del maestro Aldemaro. A mitad de la conversación, acuerdan juntarse en la casa de Elizabeth antes del concierto del jueves 28 de julio.

– ¿Qué le puede decir a la gente que se va a conseguir por primera vez con estas obras inéditas?

«Ahora que estuve trabajando el «Carnaval llanero» ¡Eso es un carnaval! La estructura perfecta del carnaval llanero, armonizado de una manera impecable, aunque hay mucha dificultad en la interpretación porque el maestro se concentró en hacer resaltar que cada sección de la Orquesta… cuando se va armando, empieza a integrar todas las filas, estructurar todos los componentes de la Orquesta, sale un joropo bellísimo, sinfónico, trancado. El bordón del arpa lo oyes en los trombones, en las tubas. Eso va a causar una impresión muy positiva dentro del público», explica Florentino Mendoza.

«El «Joropo a millón» es una selección de varios tipos de joropos acelerados, rápido. El «Merengazo» es una selección de merengues caraqueños, muy sabroso. La «Fuga con pajarillo», que la hemos hecho varias veces, la haremos versión cuerdas con cuatros solistas invitados. Cerramos con la «Suite Onda Nueva» con toda la Orquesta y como invitado tendremos al trio de Aldemaro», agrega.

– ¿Por qué alguna de estas obras de Aldemaro no habían sido ejecutadas antes?

Esta vez responde Elizabeth Rossi de Romero:  «Estaban en el archivo. Cuando él muere quedaban unas 38 o 39 sin estrenar, muchas de ellas escritas entre 2006 y 2007. Hay unas que fueron escritas hace mucho tiempo atrás, sin ser estrenadas. No hay un porqué específico. De repente hay, como la «Cantata Galaica», una obra que él escribió en el 2001-2002 que es para Orquesta y Gran Coro, entonces siempre aquí, ahí está la dificultad de los coros, además lleva grupo de gaitas escocesa, aquí es difícil. Se trata de los ocho poemas que García Lorca hizo en gallego, es una cantata con la letra en gallego. La hizo pensando en María Rivas. Ella se la sabe porque él la ponía a cantarla. Nunca hubo el chance de estrenarla».

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– ¿Entonces las obras de Aldemaro Romero siempre estuvieron disponibles para su ejecución?

«El catálogo siempre se pasaba y él le daba el score a algunas Orquestas aquí para ver si lo hacían pero no tenían el chance. Hay algunas que son Orquesta y solistas pero el problema es el solista para que puedan estrenar la pieza. En el 2006 también escribió cinco obras sacras que están sin estrenar. Una sola se estrenó en Valencia, el »Alelujazz» pero el coro fue muy pequeño y ellos mismo decían que no había tenido una buena ejecución. Dejó «Ave verum», «Exsultate, jubilate» y otro «Ave María». Muchas veces le echaba broma y le decía: «Mi amor, como ya estás viejito, te metiste a escribir puras obras religiosas». El «Gloria» nunca se tocó aquí. Cada vez que veo al director Alfredo Rugeles, le digo: «El maestro te va a salir», porque mira que él andaba detrás de Rugeles para que estrenaran eso. El problema es el coro. Al final la estrenaron en Croacia y todos los años la tocan allá. Él tenía la grabación y siempre se sentaba en el sillón a oírla: «Esto es lo mejor que yo he hecho en mi vida», decía Aldemaro», agrega la viuda.

– ¿Estás piezas que se van a ejecutar de dónde provienen?

«Estas las hizo al final, se las comisionó el maestro Abreu. Fueron cinco: «Joropo a millón», «Cantos de Barlovento», «El gran calipso»… él me decía: «Por fin me están pagando algo por escribir». Cuando las entregó fue cuando hizo «Fuga con pajarillo», se las dio a Abreu y le dijo: «Usted me comisionó esto, entonces yo le regalo la versión sinfónica de la Fuga con pajarillo». Es la que más tocan en todas partes, al menos una vez cada dos meses me la piden afuera. También hay una versión de «Fuga con pajarillo» para doce saxofones que la estrenaron en Italia», agrega.

– ¿Por qué se decidió elegir estas piezas que se ejecutarán en el Centro Cultural Chacao?

» Yo vine a descubrir a Aldemaro en los años 70s por ahí. Yo no vivía en Venezuela, había escuchado la Onda Nueva, en Alemania. Me llamó la atención esa música pero yo estaba en otra cosa», explica Mendoza.

«Luego cuando me fui a estudiar a Paris, me invitaron a trabajar como guía de un grupo venezolano que estaban participando en un festival de comida venezolana en la Torre Eiffel; ahí fue que lo conocí. Los que cantaban con él allá en la Onda Nueva, eran mis compañeros de estudio: Frank Quintero, Michael y César Berti. Más adelante cuando se crea la Orquesta Filarmónica de Caracas en el año 79, lo veo dirigir, yo era cellista de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, lo vi con muchos músicos de altísimo nivel, tanto de Europa como Estados Unidos. Investigando descubro que mucho antes Aldemaro estaba en una Big Band en New York, fue cuando hizo Dinner In Caracas. Murió y quedé en deuda con él, nunca toqué la «Suite» para cello que él compuso bellísimo. Desde que estoy en Chacao, en el año 2002, hemos hecho varias giras, en Portugal por ejemplo, llevamos la «Fuga con pajarillo» y la «Suite Onda Nueva», las mas populares dentro de las Orquestas. Llegó la propuesta de Caracas Contratiempo, a través de Elisa Vega, nuestra directora, quien gentilmente hizo la diligencia de buscarnos estas obras que no se han tocado, al menos en Caracas: «Joropo a millón», «Carnaval llanero» y «Merengazo», obras muy complejas».

– ¿Elizabeth, usted tiene un registro preciso de las obras del maestro Aldemaro Romero?

«El catálogo completo lo llevo al día, desde antes, cuando él estaba vivo. Iban estrenando obras y yo iba anotando quién la estrenaba, todo. Obras académicas dejó 100 exactamente, la mayoría de ellas hechas desde 1997 para acá, de ahí en adelante escribió 83 obras. Se la pasaba todo el día escribiendo obras. Yo esas las tenía muy ordenadas, me las daba, las metía en sobres y se repartían a las Orquestas, se mandaban a Italia para la edición, porque su editor es italiano. Las anteriores al 97 que fue cuando escribió «Fuga con pajarillo», «La epopeya de Bolívar», todas esas que las tenía Rodolfo Saglimbeni guardadas y luego, al morir Aldemaro, me las pasó para tenerlas», explica ella.

«Lo que se hizo después de que murió Aldemaro, acordamos sus hijos y yo, fue mandar todos los manuscritos originales a la Biblioteca de Música de la Universidad de Miami para resguardo, además que ellos tienen las condiciones para tenerlo. Lo que hice fue terminarlas de ordenar, cada uno en sobres y copiarlas. Saqué siete mil y pico de copias. Eso me llevó como pocos meses, un año diría yo, para mandarlo, porque estaban ordenadas. Me fui a Italia, donde su editor, Aldo Pagani, tenía montones de los años 70s y le dije que venía a revisar. Pasé tres días en el archivo en Milán. Ahí salieron 126 canciones hasta ahora, algunas inéditas», agrega.

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