"No están bien": mamá de niño desaparecido en La Grita desmiente audio
Versiones van y vienen del caso de las personas desaparecidas en La Grita. La madre de uno de los niños de la familia Luna Roa decidió hablar para desmentir rumores y aclarar cuál es la situación hasta el momento
El caso de las familias desaparecidas en La Grita parece tener mil versiones. Cada día que pasa salen nuevas voces que interpretan lo que terceros han dicho, rumores que se transmiten por las redes sociales o simples chismes que buscan aumentar la tragedia.
Por ejemplo, un audio que se difundió este miércoles 7 de septiembre a la prensa de La Grita, abrió un nueva línea de estudio del caso. La voz de un hombre afirmaba que las personas desaparecidas supuestamente estaban bien.
Pero hay otra voz oficial, con nombre y apellido, que desmiente cualquier «buena» noticia. Lissette Gutiérrez, quien quiso aclarar en qué punto están los familiares de los desaparecidos, separando el polvo y la paja de los rumores.
«Les habla Lissette Gutiérrez, madre de Dickson Luna, uno de los niños que está desaparecido en el caso de La Grita», le dice a El Estímulo.
Al inicio, Lissette aclara que se enteró de la situación de su hijo porque el padre del niño, Richard Homero Luna Roa, la llamó para informarle que había puesto una denuncia por desaparición.
Richard no asistió solo a poner la denuncia, lo acompaño su cuñado, Diego Prato porque la familia Luna Roa también se había llevado a Valery Sofía Prato Luna, una bebé que para el 22 de agosto tenía ocho días de nacida y no tuvieron más información de su paradero y el grupo dijo que la salida sería por cuatro días.
Gutiérrez expresa: «Me insistieron en que les diera el número de cédula e incluso yo les dije que el niño estaba de paseo y me habían pedido los permisos para irse con la abuela (Brígida del Socorro Roa)».
No obstante, tanto Luna como Prato aseveraron que era una situación difícil. Le indicaron que la familia se había ido porque «pensaban que el mundo se iba a acabar y ellos iban a buscar un refugio».
Lissette expresa:»Ellos me dijeron que la tía de mi niño, Roxana Luna, y su mamá Brígida alegaban que Roxana hablaba a través de la virgen y que era una santa y que las dirigía una señora (llamada) Rosa».
Si bien al principio era incrédula, Lissette luego inició los procesos legales para encontrar a Dickson, su hijo.
Después de movilizarse a La Grita, la atendió el inspector del CICPC José Patiño e iniciaron las investigaciones, las cuales todavía no han revelado hallazgos precisos. Lissette sigue sin saber si Dickson y el resto de los integrantes de la familia se encuentran bien.
¿Qué pasa con el audio?
Lissette confirmó que el audio lo grabó Richard Luna y ha creado confusión en los grupos de búsqueda y las unidades de investigación: «Ahora que las autoridades me dieron su apoyo, sale un audio alegando que ellos están bien, que no están en cosas raras, que están en una finca alquilados, con todas las comodidades. Cuando me decían que ellos (los Luna Roa) (…) iban a buscar un refugio porque harían como un arca de Noé porque nosotros estábamos condenados».
Lissette Gutiérrez tiene un audio inicial que confirma su versión de los hechos y está en manos de las autoridades como evidencia. Además, desconoce cuándo se grabó el que se difundió este miércoles 7 de septiembre.
Desde el 24 de agosto, que fue el día en que recibió la noticia de la denuncia por desaparición, ha asistido recurrentemente a la sede del CICPC. Sin embargo, sigue sin haber hallazgos o una pista de dónde podrían estar Dickson y el resto de personas.
Además reconoció que no conoce a Rosa García, la mujer que convenció al grupo familiar Luna Roa de asistir al presunto retiro espiritual.
De todo lo que se ha dicho, hay una sola cosa cierta: hasta que no aparezcan las personas, los familiares no tendrán paz.
El gobernador regional, Hiroshi Hase, dijo en una reunión: "Se dice que la tasa de supervivencia de las personas que necesitan ser rescatadas desciende rápidamente". Un perro entrenado para conseguir sobrevivientes perdió interés en la búsqueda
En la lancha que partió desde la isla San Andres, a más de 380 kilómetros de Nicaragua, iban cerca de 40 personas, pero 35 eran de origen venezolano. Roxangelich Rivas, una carabobeña, era una de ellas. Sus familiares no sabía que iniciaría la travesía hacia EEUU y ahora temen que las autoridades paralicen la búsqueda
Antes de irse al presunto retiro espiritual a una montaña de La Grita, Rosa García dejó claras las condiciones para asistir al encuentro: "No podemos contarle nada a nadie. Si uno mete la pata, pereceremos todos". ¿A quién le dijo eso? ¿Por qué señalaba a la Iglesia? En esta nota hay respuestas