Disputa y mordisco al gobernador de Nueva Esparta pasa a investigaciones penales

Sobre este hecho se manejan dos versiones: La del gobernador, quien dijo en rueda de prensa que acudió al centro deportivo tras ser notificado de que una turba llegó a dañar las instalaciones del estadio, donde fue “fuertemente insultado y posteriormente agredido físicamente”; y la del síndico, quien refirió también en declaraciones a la prensa que se encontraban realizando una “inspección ocular extrajudicial” en el lugar, en el que fue agredido “física y verbalmente”. La disputa, finalmente, era por la titularidad del recinto.

Díaz afirmó que este hecho se generó luego de que en días pasados sostuviera un encuentro con el alcalde de Mariño, Francisco González, quien le solicitó que le entregara los estadios de Conejeros y Bella Vista, a lo cual se negó porque tiene en su poder los documentos que indican que estos “inmuebles” pertenecen a la gobernación del estado. Entregó copia de dichas actas a los comunicadores y aseguró que esas instalaciones están a disposición de los deportistas.

“Después de esa conversación vimos que empezó a surgir una provocación para que cayéramos en pelea. Yo soy un hombre de entendimiento y colaboración, pero esto fue la gota que sobrepasó el vaso. Un grupo del gobierno municipal de Mariño llegó rompiendo puertas, insultando a mi padre cuando trató de impedirlo, por lo que le dio una crisis de nervios. Están tratando de retar al gobierno regional. Al ver a mi padre tembloroso, por esa turba de psuvistas, me dirigí al síndico exigiéndole respeto y me dijo cualquier cantidad de epítetos que yo respondí también. Inmediatamente el hombre como un gato o como un perro me mordió. En ese momento de incertidumbre nos fuimos y el pueblo asumió el liderazgo y el reclamo. Seguidamente ocurrieron actos de violencia que generaron contusiones a varias personas”, relató el gobernador.

Díaz fue enfático al afirmar que hará valer todos los derechos del gobierno regional y que no cederá ante las amenazas y agresiones. Del mismo modo indicó que el vicepresidente de la República, Tareck El Aissami, le dijo que como gobernador tenía que nombrar a su gente y hacer respetar sus funciones. “Él reconoció los nombramientos que hemos hecho y con eso mandó un mensaje al Psuv de que tiene que respetar la autoridad que tengo en este momento”.

Anunció que tras acudir al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y al cuerpo forense a poner la denuncia de lo ocurrido, tomarán todas las acciones pertinentes “por el camino de la justicia”. “Y que ellos hagan todo lo que tengan y quieran hacer”.

Segunda versión

El alcalde Francisco González rechazó contundentemente los hechos de violencia perpetrados en contra de los trabajadores de la alcaldía, por parte de la autoridad regional y refirió tener la documentación necesaria para demostrar que el estadio le pertenece al municipio.

“De forma violenta y arbitraria agredió física y verbalmente a nuestros funcionarios. Estaban Francisco Narváez y otros de la Gobernación. Había civiles armados. Vamos a proceder con todo el peso de la ley para que se cumplan las normas. No lo vamos a dejar aquí. Lo llevaremos a todos los entes que puedan sancionar a este gobernador desadaptado. No se justifica por ningún medio lo que hizo porque no ha superado la derrota que le propinamos cuando perdió todas las alcaldías. Solicitaremos a la Asamblea Nacional Constituyente y a la Comisión de la Verdad que investigue y se le allane la inmunidad al gobernador Alfredo Díaz y al legislador Francisco Narváez, para que sean juzgados por los delitos cometidos y así se libre al estado de estos personajes que utilizan la violencia como forma de hacer política”, expresó.

El síndico Reinaldo Silva también mostró documentos y negó haberle mordido el dedo al mandatario insular. Dijo que él lo único que hizo fue correr. A su juicio, estas acciones se desencadenaron por la molestia que causó que estén “poniendo orden en Mariño”, la elaboración de un expediente en contra de Díaz por presuntamente tener en su casa vehículos desvalijados propiedad de la Alcaldía y la inspección al centro deportivo.

“Es un dolor entrañable para mi estar en esta situación. Como me conocen siempre he sido mediador con sectores de la oposición. Quiero recalcar que esta situación no comenzó ayer, el legislador Narváez hizo unas declaraciones llamándome “personaje macabro” y allí ya se veía la violencia. Ayer fui emboscado por el gobernador Alfredo Díaz, sus escoltas y Francisco Narváez. Ellos llegaron gritando improperios y golpeándome. Afortunadamente fui auxiliado por tres personas. De no ser así las consecuencias hubiesen sido peores”, sentenció.

Las autoridades del Cicpc informaron que como órgano de investigación penal cumplieron con el deber de iniciar las averiguaciones, haciendo las diligencias necesarias para luego remitirle la información al Ministerio Público que será el ente que tome una decisión con respecto al caso.