La oposición venezolana pidió este jueves que los 1.500 millones de dólares de Venezuela que fueron liberados por un banco en Portugal, tras cuatro años bloqueados por las sanciones, sean asignados al fondo social acordado en la mesa de negociaciones y administrado por Naciones Unidas.
Se «exige que los fondos liberados por Portugal al régimen de Nicolás Maduro sean asignados al fondo social y que sean administrados por la Organización de Naciones Unidas«, dijo en una nota de prensa el viejo Parlamento de mayoría opositora elegido en 2015, cuya legislatura venció en 2021, pero que defiende su continuidad.
Ese fondo de hasta 3.000 millones de dólares, para ser utilizado en programas sociales, fue acordado por el gobierno y la oposición en la última ronda de las hoy paralizadas negociaciones de México, celebradas en noviembre de 2024.
El bloque opositor se ofreció en el texto a hacer las «gestiones competentes ante la OFAC«, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros de Estados Unidos, que no reconoce formalmente a Maduro como presidente, para que los fondos sean dirigidos a la ONU.
«Bajo ningún contexto estos recursos deben trasladarse al régimen de Maduro, que ha demostrado una y otra vez que se ha robado el dinero de los venezolanos y podemos poner como ejemplo todo el desfalco que hubo en (la petrolera estatal) PDVSA», insistió el comunicado, en referencia a un escándalo de corrupción desvelado en marzo pasado.
Según una sentencia, divulgada el miércoles por el gobierno venezolano, un tribunal judicial de Lisboa ordenó a la entidad financiera Novo Banco liberar el dinero de las cuentas pertenecientes a instituciones y empresas estatales venezolanas como el Banco de Desarrollo Económico y Social (BANDES), PDVSA y sus empresas filiales.
«No es que ese dinero va a llegar aquí mañana porque efectivamente» el «BANDES está bloqueado», explicó no obstante el viceministro de Política Antibloqueo, William Castillo, en relación a las sanciones contra esta institución por parte de la OFAC.
El Ejecutivo venezolano considera la acción como una «victoria judicial» y señaló en un comunicado que se reserva acciones por «daños y perjuicios causados a sus entidades y la población», tras el congelamiento de sus recursos.
El gobierno de Maduro ha sido blanco de sanciones internacionales, principalmente de Estados Unidos, tras desconocer la reelección del gobernante socialista en 2018, que tachó de fraude.
Maduro denunciaque Venezuela tiene al menos 24.000 millones de dólares «secuestrados» en el extranjero debido a las sanciones.