El jefe de Estado, que fue recibido en Tiad por el rey Salmán bin Abdulaziz Al Saud, intervendrá en el encuentro en el que abordará la situación del mercado internacional del petróleo caracterizado por bajos precios producto de una sobre oferta calculada en al menos 1,5 millones de barriles diarios.
Integran el ASPA 11 Estados miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y los 22 de la Liga Árabe.
El gobierno de Venezuela intenta infructuosamente desde octubre de 2014 lograr consenso en la Organización de Países Exportadores de Petróleo y posteriormente incluyó a los No OPEP, para recortar producción y recuperar los precios. El desplome de más de 50% desde junio de 2014 ha comprometido el funcionamiento de la economía que depende en 96% de los ingresos de la renta petrolera.
En un primer momento el Ejecutivo nacional defendió una banda de precios, pero más recientemente el presidente Maduro indicó que el precio debe estar en $88, señalando que ese era el precio justo para el barril de petróleo.
“No puede ser que algo que llaman ‘mercado’ le impongan el precio a los países productores que le echamos pierna, que metemos el taladro”, dijo en su programa televisivo el martes 20 de octubre.
La cesta venezolana cerró la semana pasada en $39,90 para un promedio en el año de $46,78, una caída de $41,64 por barril en comparación con el cierre de crudo en 2014.