Industria

Producción de Ford Venezuela se desploma a 0,61% de su capacidad

En un 99, 39% ha caído la manufactura de vehículos en la planta de Ford Motors de Venezuela en la zona industrial de Valencia, entre 2006 y lo que se proyecta para todo 2018, afirmó Eliécer Cohén, secretario General del sindicato, quien teme un cierre definitivo de la filial local de la montadora estadounidense.

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FOTO: AP Photo/Alan Diaz

Cohén dijo que en 2006 se ensamblaron 35.876 unidades que era el 100% de su capacidad instalada, pero desde allí comenzó el declive hasta este año, cuando solamente sacarían un 0,61% de los vehículos que pueden armar en la empresa.

En 2018 prevén ensamblar solamente 219 unidades (menos de una por día).

La situación mantiene en alerta a los 967 trabajadores, 400 de los cuales permanecen en sus casas con permiso remunerado, añadió Cohén.

Adicionalmente, a los integrantes del sindicato les informaron desde la gerencia de la firma transnacional, que no se harán más los modelos del Ford Fiesta Titanium, Cargo 1721, Explorer ni el modelo F350 Super Duty.

Solo se sacará al mercado este año la camioneta EcoSport.

Ante el panorama, temen que se dé el desenlace similar a otras ensambladoras que han cerrado sus operaciones o están a punto de hacerlo.

“Al no tener productos, ni manufactura constante, se pone más en riesgo nuestra sustentabilidad y ya con esta baja de producción todo indica que en 2019 estamos en puertas de un cierre técnico, y no queremos que nos pase lo mismo que a los compañeros de General Motors y de FCA-Chrysler”, dijo Cohén.

El ensamblaje del modelo EcoSport 2019 será de unidades piloto que enviarán a los concesionarios de Ford.

Viven con sueldo mínimo

La dramática situación que enfrentan en la planta de Ford Motors de Venezuela mantiene en ascuas a los trabajadores que este jueves 12 de julio acudieron a la planta a buscar una dotación que consiguió el sindicato. En uno de los portones ingresaron para recibir cinco rollos de papel higiénico, nueve pastillas de jabón, tres camisas y dos pantalones, confirmaron representantes sindicales.

Jimme Rojas, secretario de Acción Social del sindicato, es un obrero que lleva 15 años como empleado de la firma transnacional. Reveló que venderá parte de su dotación para completar la comida en su casa, “pues con lo que ganamos ya ni un kilo de queso se puede comprar”, afirmó.

Señaló que muchos de los obreros viven con sueldo mínimo y se les hace inalcanzable comprar todos los alimentos que requieren.

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