El ministro de Relaciones Interiores Remigio Ceballos, dijo en una alocución que "tras arduas labores de investigación e inteligencia", los órganos de seguridad intervinieron en el caso de Carlos Enrique Gómez Rodríguez, alias “El Conejo”.
Hasta ahora se confirman cinco heridos: dos niñas, una mujer y dos funcionarios. Además durante el enfrentamiento se encontraron garitas en las zonas montañosas y en una de ellas se localizó un celular con una foto reciente Carlos Revette, alias Koki
Desde Barinas hasta Nueva Esparta, la geografía venezolana está cruzada por cárceles y encarcelados que hicieron del encierro un negocio y la base de su liderazgo. En sus centros de reclusión, rigen, diseñan crímenes, venden drogas y hasta rumbean. Adentro y afuera, celebran —whisky en mano— sus reinados de terror al ritmo que ellos tocan, mientras el gobierno ameniza las funestas comparsas
La delincuencia en Venezuela supera a la ficción. Ni escondites, ni guaridas, ni clandestinidad. Los malandros son tan públicos que tienen perfiles oficiales en las redes sociales. En ellas muestran videos, fotografías y, en ocasiones, parajes de su vida cotidiana. La impunidad real suma a la digital, donde los maleantes se muestran hasta con arsenales y alijos de drogas Las bandas delictivas venezolanas y sus líderes no solo tomaron control de cárceles y zonas enteras de ciudades del país, sino que también han llevado su exposición a ambientes digitales. Los malandros tienen perfiles en las redes sociales. La predilección por Facebook es evidente, donde pueden compartir fotos y hasta información personal. Retratos de prontuarios, nombre y apellidos, identifican fácilmente a perfiles públicos de la red social azul.
Bandas y pranes toman el control de amplios sectores de las ciudades venezolanas. Víctimas del miedo, los habitantes callan y bajan la cabeza ante las amenazas y alertas y la policía opta por bailar al ritmo del hampa. Donde los criminales gobiernan, no hay leyes que valgan, solo la arbitrariedad
No se trata del conejo de Alicia del país de las maravillas, tampoco el de PlayBoy -aunque él quería. Teófilo Rodríguez Cazorla gobernó la cárcel San Antonio de Nueva Esparta hasta que una balacera lo dejó tendido fuera de ella, una última escapada mortal. Sus seguidores, presos, lo despidieron con descaro disparando al viento
No se trata del conejo de Alicia del país de las maravillas, tampoco el de PlayBoy -aunque él quería. Teófilo Rodríguez Cazorla gobernó la cárcel San Antonio de Nueva Esparta hasta que una balacera lo dejó tendido fuera de ella, una última escapada mortal. Sus seguidores, presos, lo despidieron con descaro disparando al viento
Efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana y fuerzas policiales se disponían la noche del miércoles a entrar al penal de San Antonio, en la isla de Margarita, para desarmar a los prisioneros que han hecho alarde de un arsenal de armas de guerra ,tras el asesinato de uno de sus jefes, el criminal apodado El Conejo , reportaron medios digitales citando varias fuentes periodísticas.
En el año 2012 logró incursionar en la vida cotidiana del penal de San Antonio en la Isla de Margarita cuando desarrollaba la obra de su último proyecto artístico. Nacida en Rumania, respingada y perseverante, llamó la atención de los presos quienes la condujeron el encuentro con la suprema autoridad de la cárcel más violenta de Venezuela: alias “El Conejo”
El diputado también precisó que en el país "no hay equilibrio" en el sistema de justicia, y rechazó las humillaciones a las que ha sido sometida Lilian Tintori en la cárcel de Ramo Verde.
La cárcel de San Antonio, en la isla de Margarita, es fiel reflejo del "mundo al revés" que tanto denunciaba Eduardo Galeano: presos que no son presos, un mafioso que manejaba guardias y recintos penales que son hoteles.
Teófilo Cazorla Rodríguez fue abaleado la mañana de este domingo a las afueras del local nocturno Yards, en Margarita . Luego de luchar varias horas por su vida, murió en un centro asistencial de la isla, informaron medios regionales.