Las típicas arepas de Trujillo llegan a Madrid
Con su marca Trujiman, Carlos Moreno Terán ofrece en la capital española las típicas arepas de Trujillo, hechas con maíz cocinado y luego molido, con sal y sin nada de aditivos químicos
Con su marca Trujiman, Carlos Moreno Terán ofrece en la capital española las típicas arepas de Trujillo, hechas con maíz cocinado y luego molido, con sal y sin nada de aditivos químicos
Carlos Moreno Terán soñaba con ofrecer, en España, arepas hechas como en las casas de Trujillo, en Los Andes venezolanos, donde creció. Inspirado en la receta de su familia, lo hizo realidad.
Con el nombre de Arepa Trujiman, Carlos comercializa estos panes redondos y planos de maíz, tipicos de Venezuela, en varias tiendas de Madrid. Lo que diferencia a las arepas típicas trujillanas es que se hacen con maíz cocinado y luego molido, sazonado solo con sal. Es una arepa de sabor puro, con una contextura especial.
Todo el proceso es artesanal, desde la cocción de maíz, la molienda y su moldeado. Nada es industrial. Su elaboración cumple estrictamente las normas de seguridad alimentaria e higiene de la Unión Europea.
Aunque son muy planas, se pueden rellenar. Son 100% libre de gluten y no tienen ningún tipo de conservantes. Carlos las ofrece en paquetes de cinco, empacadas al vacío y congeladas de inmediato, para que conserven todas las propiedades nutricionales del maíz. Se calientan en tres minutos en horno o plancha y quedan frescas y crocantes, asegura.
El entusiasmo y la pasión de Carlos Moreno Terán en su proyecto es contagioso. Explica que el principal reto ha sido encontrar la materia prima ideal, el maíz puro, natural y no transgénico. Luego, buscar el sitio para prepararlas y almacenar tanto el maíz como las arepas ya hechas.
Una vez superados estos dos retos, Carlos se preocupó de perfeccionar el empaque, el congelado, el despacho y el transporte, cuidando siempre de preservar la cadena de frío.
“De todo me ocupé personalmente, así como de la promoción y difusión de este emprendimiento que siempre ha sido una evocación con el encanto de tantas escenas y querencias desde mi propia infancia y mi familia,” comenta.
Tiene experiencia en el negocio. Antes de establecerse en Madrid, Carlos vendió sus arepas trujillanas en Caracas, la capital venezolana, durante muchos años.
Se trata de un logro de un venezolano en Madrid que también es un apetitoso atractivo alimenticio para los ciudadanos de cualquier parte del mundo que se encuentren en Madrid, sean deportistas, jóvenes, niños, personas celíacas, vegetarianos y otros.
Por los momentos, se encuentran disponibles en tiendas como Mándalo Spain y La Cachiterie en Las Tablas y Atocha. En su Instagram @arepastrujiman y en su web www.arepastrujiman hay más información.