A las ocho meses de edad llegó el diagnóstico: Jheison Chasoy tenía una enfermedad renal. Con su crecimiento, las cosas han empeorado y su madre busca ayuda para intentar aliviar sus dolores. Esta es su historia y así puedes ayudarlo
En el piso 4 del Hospital J.M. de los Ríos, donde queda la sección de Nefrología, está la habitación donde Jheison Chasoy tiene meses haciendo su rutina. Casi siempre está adormilado y se siente fatigado. Aunque tiene 16 años, su cuerpo parece el de un niño con menos edad: todo es consecuencia de su condición de salud.
Su madre, Diana Blanco, cuenta que Jheison es paciente de Nefrología desde los ocho meses de edad. El diagnóstico fue atendido de inmediato por ella y los médicos del hospital y el resultado fue favorable: gracias a un tratamiento adecuado, el niño vivió sus primeros años con una dinámica medianamente normal. No tuvo que someterse a constantes diálisis y pudo ir a la escuela. Sin embargo, la adolescencia llegó y también una complicación en sus riñones que fue deteriorando su sistema.
Ahora Jheison pierde calcio a través de la orina y eso hace que la resistencia de sus huesos disminuya significativamente y se nota a simple vista: sus piernas se han doblado y se ven torcidas. Su cadera se le ha quebrado y también el fémur. En los últimos años, las férulas se han convertido en una parte de su cuerpo para poder movilizarse.
A diferencia de otros pacientes que visitado, mi encuentro con Jheison fue a medias porque dormía. La que habló fue su acompañante y protectora, Diana, quien me contó su realidad: es madre soltera y se dedica al cuidado de su hijo. El padre del joven ayuda, pero sus ingresos son muy pocos para cubrir todos los gastos médicos, especialmente en Venezuela.
Diana cuenta que Jheison tuvo que retirarse a la mitad de su tercer año de bachillerato. Desde abril de 2023, su condición lo mantiene casi en aislamiento porque el reposo debe ser absoluto.
Y tiene sentido: Jheison no puede correr riesgos porque uno de los problemas constantes son las bacterias que invaden el catéter de su diálisis. Esa situación no solo la vive él, sino varios niños de la unidad de Nefrología del hospital.
La posibilidad de conseguir un trasplante todavía se ve lejana. Su padre es la persona que puede donar el órgano, pero antes debe pasar por varias pruebas y exámenes costosos y además, de ser una realidad, también es necesario cubrir gastos para que su cuerpo no rechace el riñón.
Jheison come muy poco. Su dieta está compuesta por carnes, verduras, frutas. Sus padres hacen un esfuerzo por cumplir las indicaciones nutricionales, pero a veces es complicado tratar de alimentarlo bien.
El niño solo desea irse a casa. Su mamá cuenta que suele inquietarse cuando sus compañeros de diálisis se complican y mueren, pero él no lo expresa abiertamente.
Actualmente, Jheison Chasoy necesita un medicamento llamado Amfotericina B de 50mg para continuar su tratamiento. No solo eso basta, también requiere de apoyo económico para otros gastos.
Si deseas y puedes ayudarlo, puedes hacerlo a través de estos medios:
Pago móvil:
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