Si eres de los que se pone de mal humor al madrugar, no estás solo. Incluso hay una explicación científica para ello. Justo a las 5 a.m. es momento en el que las personas tienen el peor estado de ánimo. Por el contrario, a las 5 p.m. se suele estar más contento. Esto se desprende de un estudio publicado en el “PLOS Digital Health Journal” y cuyas conclusiones se publicaron en el New York Post.
«El estado de ánimo tiene ciclos naturales con el punto más bajo por la mañana y el más alto por la noche, independientemente de la falta de sueño», explicó Benjamin Shapiro, autor principal del estudio y psiquiatra de Dartmouth Health. Él y su equipo llegaron a esta conclusión analizando los datos de Fitbit, un dispositivo portátil de seguimiento de la salud, de 2.602 médicos internos en el transcurso de dos años.
Utilizaron Fitbit para medir la frecuencia cardíaca continua, el recuento de pasos, los datos del sueño y las puntuaciones diarias del estado de ánimo de los participantes. Mientras tanto, medir la frecuencia cardíaca y el movimiento de los pasantes permitió a los científicos estimar su tiempo circadiano y su tiempo de vigilia. «Descubrimos que el estado de ánimo sigue un ritmo conectado con el reloj interno del cuerpo, y la influencia del reloj aumenta a medida que alguien permanece despierto por más tiempo», dijo el autor principal Danny Forger, que enseña matemáticas en la Facultad de Medicina de la UM.
Junto con el análisis de Fitbit, los investigadores también pedían periódicamente a los estudiantes que calificaran su estado de ánimo en una escala del uno al 10. Los investigadores descubrieron que, junto con la correlación tiempo-estado de ánimo antes mencionada, el estado de ánimo de los participantes empeoraba cuanto más tiempo permanecían despiertos. «La falta de sueño es un proceso separado que disminuye aún más el estado de ánimo», explicó Shapiro. «Así que alguien que esté despierto toda la noche a las 5 a. m. debería tener un estado de ánimo aún más bajo que si se despertara a las 5 a. m.». Y añadió: «Sin embargo, en un día normal, su estado de ánimo a las 5 de la mañana seguirá siendo más bajo que el de la noche».
El estudio hace varias advertencias. Por ejemplo, el equipo analizó una muestra pequeña en un laboratorio artificial. Es posible que esto no refleje con precisión la complejidad y los matices de la variación del estado de ánimo, y cómo se ve afectada por factores como la dinámica social, los horarios y los temperamentos. Los investigadores observaron que varios participantes atípicos permanecían despiertos durante más de 18 horas durante el día.
No obstante, los científicos creen que el estudio demuestra cómo una herramienta digital no invasiva como Fitbit se puede utilizar de forma eficaz en un entorno clínico. Forger, por su parte, considera que «presenta la tecnología portátil como una nueva e interesante forma de explorar estos factores en los problemas de salud mental».