Venezuela

Unas 500 personas saquearon depósitos de los CLAP en Araya

La diputada de la Unidad por el estado Sucre, Milagros Paz, afirmó que pasadas varias horas de cola, la coordinadora de Pdval comenzó a maltratar a los habitantes y a llamarlos "muertos de hambre".

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Texto: Layla Calderón y Anna Carolina Maier | Foto archivo: RONALDO SCHEMIDT, AFP

Unas 500 personas saquearon ayer en la noche los depósitos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) ubicados en Araya, municipio Cruz Salmerón Acosta del estado Sucre, pertenecientes a la Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos (Pdval).

Así lo informó a El Estímulo la diputada de la Unidad, Milagros Paz, quien resaltó que, pasadas varias horas de cola, la coordinadora de Pdval comenzó a maltratar a los habitantes y a llamarlos «muertos de hambre».

«La gente se molestó porque le estaban dando comida solo a los que eran chavistas», afirmó vía telefónica Jesús Solano, habitante de la zona.

Solano aseguró que, aprovechando la ocasión, los mismos trabajadores de la Alcaldía salieron a revender la comida al pueblo.

«Muertos de hambre»
La parlamentaria por el estado Sucre también dijo que además de comida, en los depósitos había pañales, detergente en polvo y otros productos de higiene personal que no estaban incluyendo en las bolsas de racionamiento.

La diputada indicó que los saqueos se volvieron recurrentes en la entidad porque no existe ningún tipo de transparencia en el proceso de distribución de la comida.

Paz señaló que incluso el administrador de la Alcaldía corría con las bolsas durante el saqueo y que el repartidor del gas del ente regional habría sido detenido.

«Se dice que hay 60 personas detenidas pero nos reportan que son más de 100. Hoy también los pobladores trancaron las calles», dijo a El Estímulo.

Funcionarios de la Guardia Nacional realizan operativos de seguridad en la localidad.

«No hay nada»
Jesús Solano también declaró que la situación en Araya está «bastante tensa» porque no hay alimentos ni medicinas, y señaló que hay que llevar hasta las jeringas y otros insumos al Hospital Virgen del Valle porque «no hay nada».

El poblador afirmó que tampoco hay gasolina en el pueblo y que, la poca que llega, «desaparece como por arte de magia».

Denunció que la alcaldesa ha cometido una serie de «ecocidios», ya que está «mandando a la gente a matar iguanas». Dijo que la Laguna Madre está siendo completamente destruida, y rechazó que se haya permitido la construcción de ranchos que han devastado su vegetación.

«Nadie la quiere a ella ni al gobernador de Sucre. La gente perdió credibilidad en la policía y la Guardia porque se la mantienen matraqueando los negocios. Están matando los pocos animales que hay ahí con complicidad del Ministerio del Ambiente», señaló.

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