"Hoy en horas de la mañana tomó un avión privado y se fue para Washington a solicitar la intervención de la OEA en Venezuela. Eso se llama traición a la patria", afirmó este miércoles desde el Palacio de Miraflores, en Caracas.
El presidente de la República, Nicolás Maduro, llamó a una «gran movilización» este jueves en todas las plazas Bolívar del país, para repudiar el «intervencionismo» de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Desde el Palacio de Miraflores, en Caracas, el mandatario nacional pidió un «rechazo nacional» a la actitud asumida por el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Henry Ramos Allup, «de negarse a dialogar».
El presidente del Parlamento partió este miércoles a Washington, sede de la OEA, junto al diputado Luis Florido, para asistir a la reunión del Consejo Permanente que se llevará a cabo este jueves donde el secretario general, Luis Almagro, presentará un informe sobre la crisis de Venezuela.
«Insensatez» de Ramos Allup
Maduro afirmó que Ramos Allup vuelve a caer en el «grave delito» de usurpación de funciones.
«Hoy en horas de la mañana tomó un avión privado y se fue para Washington a solicitar la intervención de la OEA en Venezuela. Eso se llama traición a la patria. Pido una posición unánime de rechazo», aseguró al recibir a un grupo de trabajadores petroleros que marcharon desde Petróleos de Venezuela (Pdvsa), en La Campiña, hasta el palacio presidencial.
El Jefe de Estado afirmó en su encendido discurso que «nunca antes» el representante político de un poder fue a EEUU para que se interviniera su propio país.
«Con OEA o sin OEA, Venezuela continuará su camino de revolución democrática, bolivariana y socialista. Es una insensatez que un grupo de partidos políticos de la derecha se vayan a Washington contando con el respaldo de gobiernos de la derecha».
Maduro afirmó que Ramos Allup suspendió el trabajo de la semana en la AN y se fue a «conspirar», y sostuvo que estos diputados utilizan sus privilegios y recursos nacionales para hacerle «daño al país».
Dos meses han pasado desde que el gobierno de Maduro expulsó a la oficina de ONU-DDHH. Entonces, el chavismo consideró a sus representantes "un bufete particular de golpistas y terroristas". Ahora les "reabre" las puertas y dice colaborará a pesar de las diferencias
Al encuentro asistirán ocho víctimas de crímenes de lesa humanidad, quienes darán su testimonio ante el Panel de Expertos de la OEA y también organizaciones que trabajan en la búsqueda de justicia para estas personas
La decisión de Maduro pone en una situación crítica a casi medio millón de venezolanos que residen en Ecuador. Ahora no tendrán sede diplomática para solicitar o renovar documentos personales y se tambalea la posibilidad de ejercer su derecho al voto
