Tras la alocución de la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, el rector manifestó que «le habría gustado que esta misma celeridad» observada para la Constituyente, «se hubiera dado también para las elecciones regionales». Sin embargo, celebró que las mismas ya tengan una fecha definida. «Es una deuda que mantenía el CNE con los venezolanos», aseguró, ya que a su juicio, es «importante que se mantengan las fechas para el ejercicio del voto».
Ratificó que la convocatoria para la Constituyente no fue votada por unanimidad, como lo mencionó más temprano la rectora Lucena. Dijo que planteó diversas consideraciones, tomando como antecedente la convocatoria a un proceso similar en 1999.
Afirmó que son varios los puntos que deben ser considerados: la convocatoria realizada por los venezolanos y no por el Presidente. Explicó que el Jefe de Estado puede presentar la iniciativa, pero es el pueblo quien tiene la potestad de hacer el llamado.
En segundo lugar, corresponde realizar a un referendo de la aprobación del trabajo de los constituyentistas. «Es un contrasentido pensar que una ANC se puede adelantar sin la participación del pueblo, sin la aprobación mayoritaria».
Dijo además que la «certidumbre» es importante para conocer el «tiempo de funcionamiento» del mismo porque según su opinión, «es un contrasentido pensar que para la enmienda es indispensable la participación del pueblo y para una constituyente no lo es».
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