Aumenta ola de secuestros en Valencia y el temor crece en la población

La creciente ola de secuestros que ha ocurrido en la ciudad de Valencia, especialmente en la parroquia San José, es el tema que copa con frecuencia las conversaciones en sitios públicos y privados. La preocupación tiene asidero en las cifras que son conocidas, en el relato de un vecino, en el amigo cercano que sufrió un secuestro express y en lo que informan algunos medios de comunicación.

Lo cierto es que se han reportado al menos 18 secuestros en menos de 15 días en Valencia, sin contar aquellos raptos que han sucedido y que nunca fueron denunciados por temor a nuevos ataques de los delincuentes.

La concejal de Valencia por Proyecto Venezuela, Judith Sukerman, indicó que la capital carabobeña ocupa el séptimo lugar como ciudad más peligrosa del mundo. “Se ha convertido en una ciudad de delincuentes. En los últimos días vemos con gran preocupación el aumento de una ola de secuestros que se da sobre todo en la parroquia San José”.

Sukerman señaló que debido a la situación decidieron acudir ante la Defensoría del Pueblo, como órgano competente para la defensa de los derechos humanos de los ciudadanos, junto a fuerzas vivas de la ciudad. “Lo hicimos como padres y madres angustiados por esta terrible circunstancia. Hay que recordar que es deber del Estado brindar la seguridad ciudadana, por eso fuimos a solicitar que tomen de inmediato las medidas que garanticen nuestros derechos”.

Modus operandi

De acuerdo con el testimonio de una de las víctimas de un secuestro express sucedido en la urbanización El Parral, el modus operandi de la banda hace pensar que se trata de personas conocedoras del manejo de armas de diferentes calibres. “Me agarraron en un semáforo un viernes en la noche, un carro se colocó adelante y otro atrás. Se bajaron con armas largas y cortas”, narró la joven que prefirió mantener su nombre en reserva y no quiso revelar cuánto pagaron sus familiares para que la liberaran.

En su caso, salió sin un rasguño del episodio, pero el temor no la abandona. “Les pido que tengan mucho cuidado, no anden solos, tengan la máxima precaución”.

El familiar de una víctima de secuestro indicó que los delincuentes piden que el pago por la liberación sea en dólares y debe ser entregado  lo antes posible. “Las personas que tienen gran cantidad de dólares no los tienen en sus casas, los guardan en bancos del exterior. Aquí uno ya ni tiene bolívares en casa, todo lo paga con tarjetas de crédito o débito”.

La concejal Sukerman refirió que de acuerdo a lo que han relatado algunos de los afectados la banda que estaría tras los secuestros parece bien entrenada. “La zona más afectada hasta ahora es el eje de la avenida Cuatricentenario donde opera una banda muy organizada que va en camionetas  4X4, tienen armas largas y saben cómo abordar a las víctimas”.

“Lo que nos preocupa es que no estamos viendo un perfil. No observamos que sucede como años atrás que los secuestros ocurrían luego de un seguimiento a personas de mucho dinero. Hay algunos  secuestros así, como el caso de dos médicos dueños de una clínica de la ciudad, pero vemos personas secuestradas en vehículos muy modestos, trabajadores, jóvenes estudiantes universitarios.”, dijo la concejal.

De igual manera, algunos afectados han relatado que han sido capturados en sitios donde van a comer y los llevan hasta sus casas para robarles electrodomésticos, ropas, zapatos, dinero y joyas. “Nadie quiere denunciar esto porque ya saben los delincuentes dónde viven las víctimas”, agregó Sukerman.

La angustia se expandeEn las zona de Los Nísperos, El Bosque, Los Mangos, El Parral, Valles de Camoruco y en la zona de El Trigal, al norte de Valencia, los vecinos han comenzado a extremar medidas, hasta donde pueden, para evitar ser víctimas de los secuestros. La organización incluye reuniones y planes conjuntos de las juntas de condominios, así como otras herramientas de comunicación entre habitantes de las zonas mencionadas.

Luis García, habitante de El Bosque desde hace 35 años, contó que los robos aumentan en las horas de cambio de guardia de los puestos policiales del sector. “Desde hace unos 20 días para acá se han incrementado los secuestros. Me consta que han ocurrido al menos 5 en esta zona. Muchos son secuestros express. Son bandas organizadas porque actúan con chalecos antibalas, armas largas, granadas, no son ladrones pequeños que roban en una calle”.

Andrea Cuadra, comerciante de Agua Blanca, indicó que la situación ha hecho que las ventas en su negocio hayan bajado considerablemente. “Se corre la voz de lo que sucede y afecta de muchas formas, a uno por el susto, a los clientes porque los roban. A nosotros nos han asaltado al menos cada 15 días”.

Carmen Pérez, habitante de Valles de Camoruco, señaló que ahora si hay un carro detrás del suyo, antes de entrar al estacionamiento del edificio donde vive, prefiere seguir de largo y dar unas vueltas hasta que sienta más seguridad para ingresar. “Algunos relatos indican que los venían siguiendo y los agarran justo  mientras esperan que se abra el portón”.