Vida sana

Los Morebons, una nueva forma saludable de tentar

Fiel a su estilo de vida saludable y a una ardua preparación en el mundo del fisicoculturismo, Morella Potolicchio creó una fórmula para comer chocolate sin culpa

Morebons
Fotos cortesía de Morella Potolicchio
Publicidad

Comer los Morebons es sentir  como la capa de chocolate se quiebra y derrite delicadamente con el calor del paladar.  Su textura es única y su sabor compite fácilmente con un bombón de chocolate venezolano muy bien elaborado. La diferencia: son un antojo saludable.

Morella Potolicchio, o Morella Fitness como es conocida en las redes sociales, inició su emprendimiento de Morebons sin siquiera ser chocolatera. Lo hizo en la cuarentena por la pandemia y con una bebé que, en ese momento, tenía seis meses y fue el motor y propósito de los Morebons.

«Lo primero, que yo siempre digo, es que yo no soy chocolatera. Yo nunca he estudiado chocolatería. A mí en lo personal me sorprende porque a mí me fascina la cocina, yo he estudiado siempre cocina. Yo me certifiqué como chef saludable en el instituto Mariano Moreno, en Estados Unidos, y estudié panadería y pastelería también allá. Pero nunca había hecho un curso de chocolatería hasta el día que los Morebons salieron», comentó Morella, con emoción.

Morebons
Morella Potolicchio con sus bombones.Foto cortesía

Morella relata que todo esté emprendimiento inició con Eat more fit, cuando todavía vivía en Miami y creó una línea de panes con diferentes requerimientos, que pudieran satisfacer las necesidades de ella misma. De ahí nace la línea de panes que se pueden conservar hasta por un año en el congelador.

Explica que lo primero que hizo fue probar fórmulas hasta crear un pan alto en proteínas, uno sin huevo para los que son alérgicos o tienen algún tipo de intolerancia y otro keto para los que llevan una dieta alta en grasas. Pero cuando, finalmente, logró la receta, sus seguidores en redes le dijeron: «Ajá, lo lograste. Ahora, véndemelo”. Un proceso similar pasó con los Morebons, que se iniciaron de manera fortuita.

El comienzo de los Morebons

Dicen que nada es casualidad y que realmente todo lo que ocurre en nuestro destino sucede por una especie de causalidad con la que tropezamos. Pero, para que algo realmente funcione, se necesita tener un producto de valor, pasión, misión y una red de apoyo. Y es en este circuito donde entra la nueva propuesta de El Hatillo, Casa Canela.

Según comentó Morella, la oportunidad de crecimiento que tuvo está ligada directamente con la confianza y el impulso que recibió de David Dos Santos, representante de Casa Canela. Cuando se enteró que ella era quien hacía los panes y le propuso que los llevara para venderlos en el espacio de Casa Canala. Al principio fue renuente, pero terminó aceptando y de ahí se desprendió una increíble historia de apoyo y crecimiento.

«Yo siempre he venido a Casa Canela a tomar café, porque es un lugar acogedor. Y como yo no como azúcar ni carbohidratos, este sitio me daba la opción de comerme un puñito de almendras o un puñito de merey y tomarme el café. De tanto verme aquí, el dueño de Casa Canela me dijo: ‘¿tú eres la de los panes? Tráeme los panes para venderlos aquí en el market‘.Pero yo todavía estaba indecisa. Hasta que un día decidí llevarlos. Luego me propuso desarrolar un menú de tostadas saludables que es el que actualmente ofrece Casa Canela», relató Morella.

Morella hacía los panes en casa de su hermana hasta que David le ofreció la cocina de Casa Canela que estaba desocupada porque en la pandemia no se realizaban talleres.

«Yo traía todos mis ingredientes, hacíamos los panes y los volvíamos a llevar a casa de mi hermana y los guardaba en unos congeladores que tenía allí. En ese momento saqué los untables de chocolate negro con avellanas, chocolate blanco con avellana. Y así es como arranco un poco más en el mundo de los postres».

Para Morella, los Morebons «son un bebé de los untables», pues con esa receta se hacen los rellenos. Comenta, con algo de gracia, que los bombones nacieron como un experimento para ella y su familia.

«Yo comienzo a hacer bombones con la base de los untables para mí y mi familia. Pero era algo muy artesanal. Mis chocolates favoritos toda la vida habían sido los Baci de Perugina y por la misma razón tenía años que no me comía uno porque no consumo azúcar. Y yo digo: ‘¿cómo haré para que los untables se parezcan al relleno de un Baci?’, y empecé a inventar», rememora.

Morebons

Continúa comentando que «un día de agradecimiento, porque ya tenía como dos meses usando la cocina de Casa Canela, le traje a David un tupperware con unos bombones, que los había hecho el día anterior en mi casa. Le aclaré que era algo que hacía para mí y mi familia. Apenas los probó me preguntó: ‘¿cuántos me puedes traer mañana?’. Yo le digo: ‘Esto es un hobbie, no he estudiado chocolatería y Casa canela se especializa en chocolates. Era un enorme compromiso», comenta Morella.

Finalmente aceptó y se aventuró con 30 bombones hechos por ella misma para abril de 2021. Hoy, en agosto de 2022, la marca se traduce en 12 empleados y en la elaboración de entre 10 mil y 15 bombones al mes. 

Un bombón para comerse a bocados

Si se ve desde la trayectoria de deportista élite que ha tenido Morella pudiéramos pensar que de cierta manera los Morebons son una especie de bombones de alto contenido nutricional, o como un bombón energético. No solo calman la ansiedad por un dulce sino que generan satisfacción y saciedad aún cuando no contiene azúcar.

Son una merienda que se come en varios bocados porque son bombones grandes. Cada uno contiene 105 calorías, pero el 70% de ellas proviene de los frutos secos que ocupan el 70% del bombón.

Morebons

«Este no es un bombón para comerse la caja de una sentada porque vas a llenar la necesidad de hambre», explica Morella sobre el valor nutricional de sus bombones.

«No es un bombón de un bocado. Los llamamos Morebons, como More de Morella. Es mi versión de un bombón con un tamaño innovador. ¿Cómo llegué a la receta? Siendo 100% sincera me basé más en el untable. Yo quería un buen untable, que me lo comiera con todo, con panquecas, tortas, yogurt. Que con lo que sea elevara el sabor y calidad del plato», recordó.

Con y sin azúcar

Un gran aliado en la bombonería de alto nivel siempre será un chocolate de calidad y el buen empleo de la técnica. Morella no solo crece en ventas y seguidores de sus productos sino que además de su desarrollo de la mano de Casa Canela, que también es su casa, realizó una alianza con una chocolatería que diseñó un producto adecuado a sus necesidades.

Gracias a su desarrollo como deportista, su enfoque en el estudio y el esfuerzo por presentar un producto de calidad que represente su compromiso con la salud la lleva a utilizar un edulcorante que mantenga sus niveles de insulina estables.

«Yo tengo  una visión de la nutrición diferente capaz a lo que hoy está de moda. Yo me voy mucho por la parte científica de los endulzantes y lo que ocasionan los endulzantes o los diferentes tipos de azúcar en tu cuerpo. Para mí la clave en mi vida, a nivel de nutrición, es mantener mi insulina estable. Hay un tipo de endulzante que no tienen calorías y no te elevan el pico de insulina», y explica que este es el tipo de endulzante que ella utiliza en su cocina. 

Todos los bombones son estandarizados y saben igual al primer día en que salieron al mercado, aseguró su creadora. Morella no solo asiente en que la fórmula no ha cambiado sino que sus bombones son el ejemplo más vívido de la voluntad que tiene el venezolano por lograr lo que quiere, no sólo a nivel de compra sino en sus proyectos.

Sí bien es cierto que la receta permanece intacta, Morella está en un nuevo momento en el que pasa de emprendedora a empresaria, y aún con su crecimiento mantiene el control de todo lo que ocurre en su cocina, pues para ella hacer el misanplas de sus productos es una forma de seguir conectando con esa magia que creó. Los Morebons no se hacen en molde. Son totalmente artesanales y cuidados al detalle.

«La receta no ha cambiado nunca. Lo que ha cambiado son técnicas, el mejor temperado del chocolate al momento de cubrir el bombón que eso los hace más crujientes. He mejorado en herramientas. Antes, literalmente, el chocolate lo hacía a baño de María con un palito de bambú y lo hacíamos muy artesanal. Ahora se compraron máquinas especiales que ya yo sé que son las correctas para derretir el chocolate. También me he dedicado mucho a capacitar a mi equipo”, señaló Morella.

Los sabores de Morebons

Todos los meses los Morebons presentan una edición limitada. Sin embargo, en las mismas ediciones especiales nació el bombón de pistacho y ese llegó para quedarse.

Ha tenido bombones de maní, de cookie dough, de torta de zanahoria, de café, pero son sólo cuatro los sabores fijos.

El favorito de Morella es el bombón con el que comenzó, un bombón de chocolate negro y avellanas, y que curiosamente es el más vendido. Morella comenta que muchas personas lo relacionan con «el Ferrero, otras con el Baci, y otras dicen que es mucho mejor que eso». Para ella, definitivamente, es mejor.

Morebons

Le sigue el bombón relleno de pistacho con cobertura de chocolate blanco y decorado con más pistacho. El bombón relleno de NoTtella tradicional, White NoTtella, cubierto con chocolate blanco vegano y chocolate negro sin azúcar y que también tiene una versión en galleta para quienes aman con locura estos pequeños placeres. Y por supuesto, está el bombón de White NoTtella con cobertura de chocolate blanco vegano.

Los bombones de Morella son un viaje especial. Cada bocado da la seguridad de que se puede reestructurar la alimentación y al mismo tiempo disfrutar lo dulce de la vida sin poner en riesgo la salud.

Morella Potolicchio le atribuye su éxito a la disciplina que aprendió con el fisicoculturismo. Comenta que este deporte le permitió conectar con sus metas y propósitos.

«Yo sé hacia donde quiero llegar y allá voy. Trabajando, trabajando y trabajando. La diferencia es que ahora todo depende de un equipo, ya no soy yo sola. Aquí estoy trabajando en un equipo que si algo no está bien ajustado en el engranaje no funciona», sentencia.

Coordenadas

Presentación. Los Morebonsvienen en cajas con una selección de los sabores disponibles, para que se puedan probar todos.

Dónde comprar. Las cajas se pueden comprar en Casa Canela, Fresh Fish y pastelería Las Nieves.

Además de Caracas, los Morebons están en otras ciudades como Maracay, Valencia, Maracaibo, Ciudad Bolívar,Puerto Ordaz y Margarita.

Instagram. @eatmorefit. A través del link de la bio se pueden comprar desde cualquier parte del país o solicitar más información.

Precio de referencia. $16 la caja de 4 bombones grandes.

Publicidad
Publicidad