La Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro) exigió el martes 15 de junio que se ponga en marcha un plan de vacunación contra la COVID-19 que incluya las zonas rurales del país.
«Si se permite que la pandemia por COVID-19 haga estragos en las zonas rurales de nuestro país, se verá afectada la alimentación de los venezolanos», escribió en Twitter Fedeagro, confederación que cuenta con 72 asociaciones y más de 12.000 agremiados.
El presidente de la organización, Celso Fantinel, indicó a la agencia de noticias EFE que «en el campo está conviviendo el covid», pero «no han dejado de trabajar» al ser un sector prioritario.
Fantinel estimó que unas 50 personas, entre trabajadores del campo, productores y familiares, han muerto en Venezuela por causas asociadas al virus.
«Hay mucha gente infectada, en el estado Zulia tuvimos una semana con un promedio de ocho muertos diarios», agregó el dirigente; y también denunció que «las cifras oficiales no se compaginan con la realidad».
Además del Zulia, también están afectados por la COVID-19 zonas rurales de los estados de Trujillo, Mérida, Portuguesa y Guárico.
«Hay brotes en todos los pueblos agrícolas venezolanos», señaló Fantinel antes de agregar que «no hay ningún tipo de coordinación» con el Gobierno para la vacunación del sector.
«Y no notas las crisis en los anaqueles porque el poder adquisitivo del venezolano es muy bajo (…), por eso no notas un desabastecimiento», destacó.
¿Qué se sabe del proceso de vacunación en Venezuela?
Hasta finales de abril pasado habían sido inmunizadas 364.000 personas en Venezuela, según el director de Emergencias en Salud de la OPS, Ciro Ugarte. De ese total, 75% correspondía a trabajadores de la salud y personas mayores de 18 años con alguna comorbilidad.
Y aunque el chavismo insiste en que las cifras son superiores, a la fecha no ha dado detalles de cuántas personas recibieron alguna dosis de las vacunas presentes en el país.
Con información de EFE