«¿Qué esperar de China? La respuesta más probable es que Venezuela logre la renovación de una de las líneas de crédito que se vence este año», señala el reporte. Esto significa un nuevo desembolso de $4.000 millones, que puede ser llevado a $5.000 millones.
Una segunda alternativa para Venezuela es tratar de extender el vencimiento de las líneas de crédito que ya tiene, lo que puede reducir la cantidad de barriles de petróleo necesarios para pagar la deuda. Con las condiciones actuales del financiamiento y la situación de los precios, el suministro a China aumentaría a 300.000 barriles diarios de 230.000 barriles diarios en 2014, detalló el informe.
Una tercera alternativa es buscar la renovación del acuerdo a largo plazo (un préstamo de $20.000 millones) o un nuevo tramo de corto plazo equivalente a la cantidad que ya fue pagada del convenio a largo plazo, que es entre 40% y 50% del monto inicial. Sin embargo, esta última opción implicaría un importante aumento de la exposición al riesgo que China tiene ante Venezuela, algo que la nación asiática ha evitado durante los últimos dos años.
El texto añade que para conseguir recursos adicionales, Venezuela probablemente tendrá que otorgarle importantes concesiones a China, y el gobierno de Pekín exigirá condiciones que incluyan medidas para resolver los desequilibrios económicos y aseguren el pago de la nueva deuda. «Por lo tanto todavía creemos que el gobierno está obligado a realizar ajustes en las próximas semanas».
]]>