El Gobierno español elevó el nivel de alerta antiterrorista tras el atentado perpetrado hoy contra el semanario Charlie Hebdo en París, en el que murieron 12 personas, con un incremento de la vigilancia de las infraestructuras críticas y una mayor presencia policial en las calles.
El ministro español del Interior, Jorge Fernández Díaz, informó sobre esta decisión, por la que se eleva de 2 a 3 el nivel de alerta, tras una reunión con representantes de los cuerpos de la lucha antiterrorista en el país.
En la actualidad la alerta terrorista en España se define en cinco niveles, cada uno de ellos con la posibilidad de intensidad alta o baja, siendo el quinto el mayor.
Mas de veinte personas resultaron heridas en el atentado contra el semanario satírico francés, perpetrado por tres individuos armados con fusiles kalashnikov abrieron fuego en la sede del Charlie Hebdo, que en el pasado recibió amenazas por publicar ilustraciones críticas con Mahoma.
Aunque no hay motivos para una alarma adicional, sería una «imprudencia no adoptar» esta activación, dijo el ministro en una rueda de prensa tras reunirse con los máximos responsables de la lucha antiterrorista de las fuerzas de seguridad del Estado y del CNI.
Pese a que el Ministerio del Interior tiene algún dato sobre la posible autoría de la acción terrorista en Francia, el ministro no quiso desvelar ninguna información al respecto pero recordó que existe una «pugna» por asumir el liderazgo del terror entre Al Qaeda y el Estado Islámico.
El titular de Interior se ha referido a los paquetes sospechosos que han resultado ser falsas alarmas, enviados a diversos medios de comunicación españoles como el diario El País, la revista 20 minutos o Libertad Digital.
Fernández Díaz explicó que la elevación de la alerta no es una medida extraordinaria adoptada solo por España, ya también lo han hecho EEUU, Reino Unido, Francia, donde se encuentra al máximo nivel, denominado Escarlata.
Previamente, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró que no «hay ninguna razón para alarmarse» en España pero consideró lógico que, tras el atentado en París, se refuercen las medidas de seguridad existentes.
La Policía española ha puesto hoy en marcha con carácter de urgencia un plan preventivo para la protección de infraestructuras críticas en el país, como estaciones de autobuses y de trenes, aeropuertos, instalaciones eléctricas o dependencias oficiales y policiales, en prevención de un posible atentado de tipo yihadista.
«En principio, vamos a reforzar la seguridad. No tenemos datos que permitan hacer una afirmación sobre lo que puede ocurrir en el futuro y no hay ninguna razón para alarmarse, pero en unas circunstancias como estas parece lo más lógico y razonable reforzar aún más las medidas de seguridad», añadió Rajoy a los medios de comunicación en la frontera de España con Andorra.
El expresidente del Gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero defendió que la reacción al atentado debe contar con «todo el peso y la fuerza de la Ley», pero «nunca abrir la puerta al odio ni condenar a ninguna colectividad».
Francia ha estado siempre cerca de España cuando ha sufrido a causa del terrorismo y España «debe estar muy cerca de Francia en este momento», dijo Rodríguez Zapatero, quien recordó comportamiento «ejemplar» de la sociedad española tras los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, en los que murieron cerca de 200 personas.
Rodríguez Zapatero hizo estas declaraciones cuando participaba junto con decenas de personas en una concentración ante la Embajada de Francia en Madrid para condenar el atentado contra el semanario satírico Charlie Hebdo.
Unas trescientas personas entre periodistas, líderes políticos y ciudadanos en general se han concentrado esta tarde delante de la Embajada de Francia al grito de «Libertad de expresión» para condenar el atentado de hoy en París contra el semanario satírico Charlie Hebdo.
Los participantes, que han guardado un minuto de silencio al inicio, también han gritado en francés y español «Todos somos Charlie», como muestra de solidaridad con las víctimas (doce muertos y varios heridos) y la publicación.
También en Barcelona (noreste), unas 300 personas se han concentrado frente al consulado de Francia para condenar el ataque terrorista.
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