¿Por qué le dieron el Nobel de la Paz al Programa de Alimentos de la ONU?
Es un organismo gigante, que recibe donaciones de más de 60 gobiernos, empresas y personas. Pero también es la que más combate el hambre en el mundo, repartiendo 15.000 millones de comidas al año y cuyo trabajo no ha cesado ni siquiera en pandemia
Al conocerse que el Programa Mundial de Alimentos ganó el Nobel de la Paz, algunos usuarios de las redes sociales se cuestionaron sobre por qué los escogieron, si ese es su trabajo y para eso disponen de fondos millonarios.
Refrendaron que otras personas, u organizaciones, luchan por la convivencia pacífica con su propio esfuerzo y logran multiplicarlo en acciones positivas.
El jurado sueco del Nobel de la Paz decidió dárselo como una manera de llamar la atención sobre las millones de personas que sufren hambre en el mundo, un grave problema que se ha agudizado durante la pandemia. El PMA nunca ha dejado de repartir comida, incluso en confinamiento.
Para el comité del Nobel, el hambre cero y la paz están estrechamente ligados.
El gigante PMA
El Programa Mundial de Alimentos, fundado en 1961 y con sede en Roma, pertenece a la Organización de Naciones Unidas y es el movimiento más grande en combate contra el hambre.
Tiene 5.600 camiones, 20 barcos y 92 aviones para entregar alimentos. Se sostiene con aportes voluntarios de más de 60 gobiernos, empresas y personas. En 2018 l recaudó 7.200 millones de dólares (unos 6102,28 millones de euros) y compró 3,6 millones de toneladas de alimentos.
Aseguran que cada año reparten 15.000 millones de raciones de alimentos a través de 1.000 ONG con las que están asociados.
Al conocer la noticia, el director del PMA, el estadounidense David Beasley reaccionó por Twitter. Aseguró que el Nobel de la Paz «es un reconocimiento conmovedor al trabajo del personal del PMA que arriesga su vida todos los días para llevar alimentos y asistencia a cerca de 100 millones de niños, mujeres y hombres hambrientos de todo el mundo. Personas cuyas vidas a menudo se ven brutalmente destrozadas por la inestabilidad, la inseguridad y los conflictos».
Para continuar trabajando en pandemia, el PMA solicitó en marzo una recaudación adicional de 350 millones de dólares (unos 296,6 millones de euros) adicionales para apoyar los servicios de aviación, envío, almacenamiento y transporte.
No era «favorito»
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU no formaba parte de los «favoritos» para ganar el Nobel. En realidad, no existen favoritos en ninguno de estos premios, pues no se hace una clasificación previa y tampoco se dan a conocer a los candidatos evaluados seriamente por el jurado. Lo único que se puede saber es quienes han sido nominados, y eso no es garantía de nada para los efectos de la academia sueca. Son puras especulaciones.
Este año, las expectativas del público se centraban en la Organización Mundial de la Salud (muy cuestionada durante la pandemia), Reporteros sin fronteras y organizaciones similares o la polémica ecologista adolescente Greta Thunberg.
Narges Mohammadi, de 51 años, ha dedicado su vida a defender los derechos humanos en su país, oponiéndose al velo obligatorio o a la pena de muerte y siendo repetidamente detenida y encarcelada por ello desde hace 22 años, cuando fue detenida por primera vez.
El bielorruso Ales Bialiatski, encarcelado por defender los Derechos Humanos, la ONG rusa Memorial y el Centro por las Libertades de Ucrania obtuvieron el galardón que, este año, estuvo cargado de simbolismo