Venezuela

Acción Solidaria: se agrava crisis de la salud en Venezuela y se necesita más ayuda

¿Qué tiene que ver la crisis política con un niño que agoniza en un hospital por falta de tratamiento médico? Todo, porque la crisis humanitaria venezolana tiene un trasfondo político. Muerta la ilusión del "Venezuela se arregló", la emergencia nacional por la ruina del sistema de salud necesita más atención y más fondos, nacionales e internacionales, nos enseña el trabajo de activistas por los Derechos Humanos.

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Acción Solidaria y la crisis de la salud en Venezuela

La crisis humanitaria compleja que sufre Venezuela no es solo un concepto manejado por la ONU, las ONG y foros internacionales. De eso pueden dejar constancia millones de personas sometidas cada día a la carencia de servicios básicos, sin derechos de acceso a la salud y luchando por alimentar a sus familias.

Mientras esto pasa ni los políticos del gobierno y de la oposición, ni sus interlocutores internacionales, logran ponerse de acuerdo para resolver las razones de fondo que explican cómo uno de los países americanos más ricos en recursos naturales esté hoy compitiendo con Haití y naciones africanas en el podio de la pobreza regional y en la necesidad global de ayuda humanitaria internacional.

Son algunas de las conclusiones que se sacan después de escuchar un balance de la ONG Acción Solidaria, presentado este jueves 4 de mayo para explicar, con mapas y datos duros, cómo fluye la ayuda distribuida por esa organización en el marco de la Emergencia Humanitaria Compleja que atraviesa Venezuela y que parece no tener fin a la vista.

Acción Solidaria, unas de las ONG de mayor prestigio en Venezuela, inició su labor en 1995, en principio luchando por la vida y los derechos de los pacientes con HIV Sida. Con el tiempo el trabajo de sus voluntarios se extiende a otras áreas que tienen que ver en general con los derechos al acceso a la salud.

«En Venezuela la afectación del derecho a la salud es sistemática y se presenta en todas las dimensiones (accesibilidad, disponibilidad, calidad y asequibilidad). El sistema sanitario no cuenta con capacidad de atención, especialmente, para personas con condiciones crónicas de salud», señala Acción Solidaria en un informe.

Su presidente, Feliciano Reyna, recibió el 16 de febrero el prestigioso Premio Internacional Martín Ennals 2023, por su trayectoria como defensor de los derechos humanos.

Hoy, Reyna y sus colaboradores elevan de nuevo la voz para recordar que la crisis venezolana sigue muy viva, empeora, y la respuesta internacional es insuficiente. El dinero no alcanza para ayudar a enfrentarla.

«Parte del esfuerzo de seguir haciendo incidencia internacional es para que podamos mantener a Venezuela en la agenda pública, porque si no, el riesgo de que se pierda (el interés) es total», comenta Reyna.

Uno de los problemas es que la atención internacional de las instituciones y donantes se desvía por otras situaciones verdaderamente graves, como la Ucrania, Siria, Sudán, y otros países en guerras abiertas que afectan a millones de civiles inocentes, especialmente niños, mujeres y ancianos.

Por su parte, Reyna señala que afuera hay una idea de que ha habido una mejora considerable en la situación de Venezuela y esa es la narrativa que se ha ido divulgando en muchos círculos.

«Pero lo que estamos viendo es una burbuja temporal y una mejora para grupos muy reducidos de la población. La mayoría sigue estando en condiciones de necesidad de asistencia desde la perspectiva humanitaria».

Feliciano Reyna, Acción Solidaria

Señala que ha sido «un reto enorme» mantener el interés sobre Venezuela y evitar que el país sea sacado del radar.

«Si no se ven posibilidades de avances, de soluciones en los temas críticos, el riesgo es de que esto se convierta en una situación humanitaria olvidada y te que te encuentres con otro término: el de la fatiga del cooperante, cuando dicen que no es mucho lo que se puede hacery que no hay manera de solucionarlo. Ese es un poco el síndrome desafortunado haitiano», agrega Reyna.

Por eso, dice, hay que seguir trabajando y combatir ese escenario con datos y acción, para lograr mantener una incidencia internacional y movilizar los apoyos para asistir a la población.

En el fondo esto tiene que ver con la necesaria búsqueda de soluciones al conflicto político venezolano. Una oportunidad, dice, es aprovechar las posibilidades que se abren con estosnuevos presidentes de la región, que podrían ayudar a contener esta deriva autoritaria y evitar que eventualmente Venezuela pudiera tomar el camino de Nicaragua, por ejemplo.

Venezuela es una crisis en el paisaje mundial

Pero ya la crisis venezolana es efectivamente poco atendida internacionalmente.

La plataforma Financial Trackin Service (FTS), que monitorea el flujo de donaciones y financiamiento directo a países que necesitan ayuda humanitaria por causa de conflictos o desastres naturales, reseña que Venezuela este año sólo ha recaudado efectivamente $68,5 millones de los $719,6 del total de requerimientos necesarios para financiar este plan de respuesta.

FTS es una división de la Oficina de Naciones Unidas para Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), la más activa de las agencias de la ONU de las que en Venezuela atienden en algo la crisis humanitaria.

En marzo pasado, una Conferencia de donantes e instituciones de la ONU, organizada en Bruselas, terminó con la promesa de representantes de países amigos y organismos multilaterales de aportar en total otros 810 millones de euros en ayuda humanitaria, tras renovar el compromiso por una salida pacífica y electoral y democrática a la crisis venezolana.

Venezuela Plan de Respuesta Humanitaria 2023

SectorRequerimientos MM $Financiado $% de Cobertura
Agua, saneamiento e higiene102.50.90.9%
Alojamiento, energía y enseres54.00.00.0%
Coordinación11.72.521.7%
Educación69.32.63.8%
Nutrición24.13.715.2%
Protección101.12.72.7%
Salud173.74.52.6%
Seguridad alimentaria183.29.04.9%
Fuente: FTS Service OCHA

«Venimos siendo una de las crisis más importantes del mundo pero uno de los planes de respuesta humanitaria menos financiado del mundo”, señala Reyna.

«No solamente el monto esmuy inferior (a lo que se necesita) sino que además esta siendo sub financiado», agrega.

Del total aportado para este año, $35 millones fueron ya desembolsados por el gobierno de Estados Unidos y 10 millones por la Comisión Europea.

En el Plan de 2022 solo llegaron efectivamente $278,5 millones de los $795 millones presupuestados, es decir poco más de un tercio de lo estimado.

El sector de la Salud, para el que se contemplaba $234 millones de este presupuesto de donantes, sólo recaudó en efecto 26,5 millones, el 11,3%.

Reyna explica que si este plan de respuesta estuviera por completo financiado, pudiera hacer que por ejemplo ciertos hospitales en el país recibieran todo lo que les hace falta, desde agua, hasta plantas eléctricas, equipamientos, reactivos y tratamientos contra enfermedades más recurrentes.

«Pero lo cierto es que con recursos limitados para toda la respuesta, eso al final no termina llegando a ese nivel de detalle y atención a la persona quelo necesita. Parece al final que no se hiciera lo suficiente”.

Feliciano Reyna

Por eso en los precarios y desabastecidos hospitales públicos siguen exigiendo a pacientes y sus familiares listas enormes de insumos básicos cuando la persona necesita someterse a algún tratamiento u operación. La impresión de la gente común es que a esos centros de salud no llega ninguna ayuda humanitaria como tampoco llegan las partidas y suministros de parte del gobierno.

«La respuesta es muy compleja, con recursos limitados», señala Reyna.

«No hay manera en una afectación tan grande…los datos de la plataforma nos hablan de casi 19 millones de personas en necesidad de asistencia y ese es un número inmenso y no hay en este momento cómo darles la respuesta que necesitarían por lo menos en las áreas esenciales y para evitar que las personas salgan del país», señala.

Según varias fuentes de datos, la intención de abandonar Venezuela está presente en un número muy importante de personas, señala.

«Lo seguiremos viendo, mientras no haya posibilidad de dar soluciones urgentes e inmediatas en materia humanitaria con los recursos que hacen falta, en las áreas que hacen falta, pero también de ir avanzando en la respuesta política que permitirá darle una solución de más largo plazo, estructural al país”.

Feliciano Reyna

Y ése último es un punto muy pertinente. Resulta que entre los acuerdos parciales alcanzados entre representantes del gobierno de Nicolás Maduro y una parte de la oposición agrupada en la llamada Plataforma Unitaria, en octubre pasado, se acordó crear un Fondo Social que supuestamente se financiaría con la liberación de unos $3.200 millones de activos venezolanos en el extranjero, para atender la crisis humanitaria venezolana y que serían administrados por instituciones de la ONU.

El acuerdo establecía que se dinero sería invertido en salud, educación, la recuperación del fallido sistema eléctrico y para ayudar a los afectados por las lluvias.

Pero esa expectativa ha quedado ahí, y no parecen haber avances concretos mientras esas conversaciones parecen detenidas una vez más.

«Ese es un tema esencial para nosotros: venimos desde hace tiempo abogando no solo por los recursos de este fondo, también sino por la entrada de más recursos al Plan de Respuesta Humanitaria del país», señala Reyna.

«Hacen falta los recursos, sumar lo que hay en el Plan de Respuesta Humanitaria, lo que se ha solicitado recientemente, es importante lo que llegue por esa vía y también por el Fondo Social” (…) independiente del problema político por resolver, la necesidad de la gente es inmensa y esos recursos hacen falta, sabiendo que esos 3.000 millones no entran de una vez, entrarán por partes, permitirán ir resolviendo algunos temas, pero hará falta eso y más», agrega.

«Hemos escuchado y ojalá sea así, que si no esposiblemover todos los fondos para elFondo Social, o parte, por lo menos de una vez por lo menos que se haga la inversión directa a través de la Organización Panamericana de la Salud, del Programa Mundial de Alimentos, que implicaría entrar en las escuelasy atender niños y niñas ennecesidad nutricional. Ojalá sea así, porque hay programas y proyectos diseñados para que con esos recursos sea posible servir a la población en necesidad», explica.

«Ojalá por lo menos lo del Fondo Social se mueva porque al final la emergencia humanitaria tiene como raíz un conflicto político que amerita ir avanzando hacia alguna soluciones que permitan también resolver lo humano, lo humanitario», dijo sobre el destino de esas reuniones.

«Si no es posiblemover todos los fondos por lo menos que se haga la inversión directa a través de la Organización Panamericana de la Salud, del Programa Mundial de Alimentos, lo que implicaría que entraran a las escuelasy atender niños ennecesidad nutricional, porque ya hay programas y proyectos diseñados para que con esos recursos sea posible servir a la población en necesidad», explica.

Las cuentas de Acción Solidaria

En el informe público de su trabajo, incidencia y coordinación ayudar a atender esta situación, Acción Solidaria reporta que desde 2016 hasta 2023 ha recibido de sus organizaciones aliadas 352 embarques con 47.000 cajas y 314 toneladas de ayuda.

«A pesar de las dificultades somos parte de un conglomerado… estamos desplegados por el país y haciéndole frente a esas dificultades,actuando para dar respuesta a las personas con necesidades».

Agradecemos muchísimo lo que han significado estas organizaciones en el terreno para que estas acciones tengan alcance nacional” dijo Reyna sobre el trabajo coordinado con otras ONG y organizaciones de la sociedad civil presentes en áreas críticas.

La ONG ha logrado cubrir todos los estados para la distribución de ayuda humanitaria gracias a una red con otras organizaciones, 137 grupos de la sociedad civil «de distinta naturaleza y tamaño», que han estado trabajando desde hace tiempo, conocen la realidad en sus terrenos.

De esta forma han logrado atender a más de 775.000 personas con tratamientos, medicinas, consultas e insumos médicos.

Pero en el tema de salud lo que hace falta no es solo distribuir tratamientos, por ejemplo para atender el cáncer hacen falta equipos para oncología, equipos y dotación de hospitales, mejoras de la infraestructura y servicios para conseguir un sistema de salud que permita empezar a cubrir las necesidades de las personas y haya una incidencia en la vida cotidiana, acota Reyna.

La plataforma Hum Venezuela, creada en 2019 por varias organizaciones de la sociedad civil venezolana «proporciona información relevante sobre la Emergencia Humanitaria Compleja (EHC)», para buscar incidir en la asistencia y protección de las personas que sufren privaciones de sus derechos, entre ellos el acceso a la salud y a la alimentación.

Según sus datos, presentados por Acción Solidaria en este encuentro con periodistas, 89,7% de la población venezolana depende hoy del precario Sistema de Salud Pública (SSP) ese mismo que no tiene insumos, infraestructura, personal ni recursos para atender a la gente.

  • ● Venezuela ya enfrentaba 70% de reducción de capacidades del SSP antes de la pandemia
  • ● El 58% de las personas está sin recursos económicos para enfrentar gastos de bolsillo
  • ● Hay 8,4 millones de personas con problemas de salud graves
  • ● Hay 9,3 millones con problemas de salud sin medicamentos
  • ● 15,5 millones sufren con problemas de salud crónicos
  • ● El 57,7% de los encuestados en diagnóstico comunitario no tiene ingresos suficientes para comprar medicinas

El trabajo de la esta ONG ha atendido, investigado y evaluado 380 casos de denuncias de violaciones a los Derechos Humanos en lo que concierne al negado acceso a la salud. Ha levantado 399 encuestas y ha logrado tres medidas cautelares y otras dos con alianzas, ante la ONU.

También sus activistas dictan talleres de capacitación para personas naturales o jurídicas sobre exigibilidad en
DDHH y trabajan en alianza estrecha con otras organizaciones para difundir y exigir el cumplimiento del derecho a la Salud.

Esto incluye incidir ante el Sistema Interamericano y Universal de DDHH, ante cuerpos diplomáticos con representación en Venezuela, otras organizaciones de sociedad civil venezolanas e internacionales y ante el Estado venezolano.

El impacto de la crisis es más grave y diferenciado entre las mujeres, niños y adolescentes y por ejemplo una de cada cuatro mujeres ni siquiera cuenta con toallas sanitarias desechables y tres de cada 10 mujeres o sus familiares viven sufriendo de alguna condición de salud.

«El 61% califica de insuficientes sus ingresos y priorizan el gasto en alimentación; el 75% no cuenta con seguro médico privado (y si tienen son con una cobertura muy limitada), tres de cada 10 tienen una prevalencia de algún tipo de discapacidad; la mayoría son mujeres y adultos mayores con condiciones crónicas de salud».

«La mayoría de las personas que atendemos son mujeres y son además mujeres de la tercera edad, que no solamente buscan medicamentos para ellas sino que los buscan para sus familias, para sus hijos, las parejas…al final hay esa responsabilidad no solo de cuidados del hogar, sino además de otras personas en condiciones de salud, enfermas, que pone sobre ellas un peso mucho más difícil», señala Natasha Saturno, coordinadora de la Unidad de Exigibilidad de Derechos Humanos de Acción Solidaria.

«Todos estamos haciendo lo que podemos desde nuestra trinchera pero (esto) sí pone de relieve la necesidad de continuar…hay gente que necesita este apoyo. El servicio más demanda es la entrega de medicamentos e insumos médicos, el 76% viene por eso», acota Saturno al recalcar que además de ayudar es necesario documentar lo que está sucediendo.

Saturno acompañó a Reyna en la presentación de este trabajo y de este escenario que intenta explicar la situación real del que es acaso el mayor problema de la mayoría de los venezolanos.

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