¿Qué tienen en común un poeta, un futbolista, un pintor y un dramaturgo que nacieron en Catia? Una sola cosa: su lugar de nacimiento. Y es que ahí, unos entusiastas de la buena comida de calle, decidieron homenajear a cada uno de estos personajes con una hamburguesa
Esta es la historia de El Monchi’s 4:20, un “carrito” de perros calientes poco usual a lo que estamos acostumbrados en Caracas. Yéricco Casantello, con la colaboración de familiares y vecinos, se dedica a la elaboración de hamburguesas, pepitos y perros calientes artesanales.
Con humildad y una gran dosis de confianza en lo que hace, Casantello presenta un menú con guiños hacia lo gourmet pero con sabor a receta casera que forma parte del patrimonio que toda familia debería tener. Las carnes: molida y mechada, preparadas en casa con fórmulas protegidas y con razón, por siete candados, se combinan con cebollas caramelizadas, tres variedades de queso, salsa pesto, jalapeños, aguacate, tomate, alfalfa y mucha creatividad para incorporarlas a cada plato en su justa medida. Sí, leyó bien: platos porque El Monchi’s sobrepasó la categoría de la “bala fría” desde que empezó.
Los protagonistas
Hace más de un año, Yéricco maduró o quizás, cocinó la idea de ofrecer algo diferente durante varios meses después de una experiencia poco exitosa con otro “carrito” en el que, según sus palabras, vio limitada su creatividad. Conocedor del tema en materia de fast food capitalino, imaginaba una hamburguesa a su gusto, con la mezcla de sabores y las proporciones que no había encontrado en su peregrinar por los perreros de referencia en la otrora sucursal del cielo.
Llegado el día del “vamos”, tenía bajo la manga dos perros calientes y cinco hamburguesas gourmet, sin contar las presentaciones tradicionales para deleite de los clientes. Luego de varias degustaciones improvisadas con los “panas” y ya con las variantes decididas y nombres asignados, fue por sugerencia de Willy McKey, vecino y amigo de la infancia, que decidieron rendir homenaje a catienses ilustres.
Así es como la tipo americana: carne rellena con queso tipo americano acompañada de cebollas caramelizadas y tocineta, se convirtió en la “Jacobo Borges”. La tipo capresa: carne rellena con queso mozzarella, más salsa pesto y tomate, pasó a llamarse “José Ignacio Cabrujas”. La tipo llanera: carne, esta vez sin relleno pero cubierta de queso telita arepero, contorneada por aguacate, huevo frito ahora la puede pedir como la “Salomón Rondón”.
Digamos que usted va donde su perrero de confianza y quiere todos los sabores que puedan entrar entre dos trozos de pan. Simplemente pide “una con todo” pero en El Monchi’s debe decir “una Pérez Bonalde Te Atrapa” por favor. Y vaya que es con todo: carne, pollo, chuleta, carne mechada. También puede pedir “El Mechuo” (sic) perro caliente de carne mechada, papas fritas y alfalfa donde la salchicha es lo opcional.
Mención aparte merece la hamburguesa “Bachaco”, protagonista picante de la carta. Alfredo Madrid, “El Bachaco”, personaje anónimo para la mayoría de nosotros, fue un vecino y mentor de Casantello. Uno de esos personajes entrañables que de tanta cotidianidad van perdiendo el nombre de pila para ser sustituido por un apodo y que en los afectos de Yéricco ocupa un lugar privilegiado. Con esta hamburguesa también se reconoce el aporte de Willy McKey al proyecto: El Bachaco era su padre.
Más allá de las peripecias por encontrar los ingredientes, para Yéricco y su equipo esta historia apenas comienza: Bárbara es la alquimista del pesto; Alex el utility de postín y responsable de elaborar unas presentaciones que rozan esculturas; Romeo siempre atento a la clientela; su hijo Samuel, su madre María y su “otra mamá” Magaly quien es la autora intelectual de la carne mechada y el aderezo picante.
Estos emprendedores ya tiene su espacio reservado para una hamburguesa gourmet de pollo y dicen “estar pendientes” con la versión Monchi’s del choripán. Si el cielo es el límite, el bulevar de Catia parece ser un buen punto de partida.
Así que si está cerca, tome nota. Si no está tan cerca, no se limite. Es fácil: en el bulevar de Catia, justo a la salida de la estación Pérez Bonalde, dirección a la plaza que lleva el nombre del poeta.
Coordenadas para rendir homenaje a los catienses en una hamburguesa:
Está compuesta de una milanesa de 85 gramos de pollo, ensalada rallada, mostaza y pepinillos, todo dentro de dos panes formulados con la receta de la casa
Fundado por Víctor Arape cuando tenía solo 17 años, estos tráilers ofrecen sándwiches de carne, hamburguesas y perros calientes. Tiene dos sedes y 15 empleados
Esta franquicia sorprende a los conductores de Caracas con repartos gratuitos en medio del tráfico. Es parte de una campaña de mercadeo ideada por Irrael Gómez
