Venezuela

¿Llegó la hora de María Corina?

La decisión de María Corina Machado de deslindarse de la Mesa de la Unidad Democrática representa una gran interrogante no sólo para la alianza opositora, por las repercusiones que pueda tener tal determinación, sino que también constituye un gran desafío para la dirigente. Ahora sabremos si llegó, finalmente, su hora.

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María Corina Machado
Fotografía: Andrea Hernández | Archivo El Estímulo

María Corina Machado ha demostrado en estos años persistencia y claridad en sus mensajes, sin embargo hasta ahora eso no ha repercutido en la consolidación de una posición de liderazgo político en el campo opositor. No pocos de sus seguidores se lo adjudican a trabas dentro de la MUD para impedir que ella resalte, ahora ya no tendrá tal impedimento. Y allí radica el verdadero desafío que para ella comienza ahora: demostrar que su mensaje y su estrategia comulgan e interpretan el sentir de la mayoría en Venezuela.
Hasta el mes de febrero pasado, mucho antes de que se agudizara la crisis y obviamente antes de los días de protesta y represión entre abril y julio, María Corina Machado se había borrado del imaginario como referente de “líder de oposición”. En los primeros días del pasado febrero, Luis Vicente León publicaba un análisis con cuarteto de líderes según una reciente encuesta de Datanálisis para la época: Leopoldo López había desplazado a Henrique Capriles como principal referente, pero éste seguía de seguía con una posición de peso, entre los encuestados, y de seguidas eran mencionados Henry Ramos Allup y Henri Falcón.
Como suele decir Luis Vicente, una encuesta es una fotografía de un momento. Aquella era la fotografía en febrero de 2017. ¿Cuál es la fotografía de hoy a inicios de este agosto tras los meses duros que hemos vivido? ¿Habrá variado la percepción sobre el liderazgo tras el traslado de Leopoldo a su casa? ¿Cómo interpreta el venezolano opositor que finalmente el gobierno haya impuesto su constituyente?
Con mucha frecuencia desde Vente nos recuerdan que en su momento María Corina Machado fue la diputada más votada en las parlamentarias de 2010. Si bien el dato es correcto, debe vérsele en contexto. Ocupando la posición salidora del mismo circuito (el más densamente poblado y sin duda opositor: Chacao, Baruta, El Hatillo), cinco años después Freddy Guevara también fue el diputado más votado del país con un número muy similar de votos al que obtuvo ella. Esos votos en realidad son de la oposición, con una propuesta unitaria.
Tan es así que si se revisa la votación de las primarias presidenciales de la MUD, dos años después, María Corina Machado sacó menos de la mitad de los votos que obtuvo en las parlamentarias. Qué paradójico: en un circuito electoral obtienes más votos que en una competencia de carácter nacional. En 2012, ella sacó finalmente menos del 4 por ciento de todos los votos para escoger al abanderado presidencial de la unidad opositora.
En política mantener determinación y un discurso consistente no siempre es sinónimo de éxito. Si medimos el éxito político como la capacidad de influir en la gente y lograr que los ciudadanos acaten tus planteamientos. Lograr que de forma voluntaria el pueblo te siga es el desiderátum de cualquier político, bajo cualquier circunstancia.
Más allá de los números, en mi opinión, María Corina Machado ha tenido dificultades en hacer crecer su base de apoyo. Se lo adjudico a un discurso que de forma recurrente le dice a los otros algo así como: vieron, yo se los dije. Asumirse como una voz moral, para juzgar la acción y estrategias políticas de otros (cuando también eres parte de esa lucha) no creo que le sume apoyos. Y los necesita! Invito a quien me lee a que me nombre 3 ó 4 dirigentes de Vente diferentes a María Corina que tengan presencia e impacto público.
Esa María Corina que ve con facilidad la paja en el ojo ajeno, tal vez debería también reconocer sus propios yerros. La estrategia bautizada como “La salida”, en 2014, es tal vez el más simbólico. Pese a que ella fue una de las impulsoras principales de aquello, una vez que devino en una estrategia fallida sencillamente ésta quedó huérfana. No he escuchado decir a María Corina que aquello fue un error o que no se supo interpretar el momento.
En este agosto de 2017 María Corina Machado da un paso al frente en una dirección diferente a la MUD. La alianza opositora tendrá una papa caliente, sin duda, para evidenciar que tal decisión no significa un daño importante en la unidad opositora.
Ella, en tanto, también tiene su propia papa caliente. En mi opinión tendrá que demostrar al menos dos cosas: 1) que interpreta el sentir genuino de la mayoría; 2) que su acción no beneficia al régimen.
Y la ciudadanía (y cabe decir la historia) evaluará esta decisión en el tiempo venidero. Y María Corina Machado no tendrá a otros a quien responsabilizar si tomó la decisión errada.]]>

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