¿Sufres de la tiroides? Esto es lo que debes comer
Si estás permanentemente cansado y somnoliento, sientes frío, tienes dificultad para concentrarte, olvidas las cosas y te sientes deprimido. O por el contrario, tienes calor, palpitaciones e incluso temblores, estás irritable y sufres de insomnio. Si has perdido o ganado mucho peso en poco tiempo, se te cae el cabello, tienes la piel seca y las uñas escamadas, presentas hinchazón en cara y manos, puedes tener problemas de tiroides
Esta glándula de apenas 25 gramos en forma de mariposa ubicada en el cuello es capaz de hacerte gozar o padecer un montón de cosas y alterar desde la cantidad de glóbulos rojos de la sangre hasta el valor del colesterol, suscitando los cambios más extremos en el organismo.
Cuando la tiroides no funciona correctamente puede ser por falta de iodo, que le impide fabricar las hormonas que debe o porque la encargada de estimularla para que funcione tiene algún desperfecto y deja de hacerlo. También puede suceder que sea atacada por los anticuerpos como si se tratara de un cuerpo extraño.
“Existe una relación directa entre la alimentación y la síntesis y utilización de las hormonas tiroideas; las deficiencias nutricionales y la sobrecarga de sustancias tóxicas en el organismo son los principales implicados en el desarrollo del hipotiroidismo” afirma la doctora Margarita Botero, especialista en obesidad del Centro Médico Antienvejecimiento.
Por ello recomienda la nutrición ortomolecular, que consiste en una dieta basada en el consumo dedosis muy altas de vitaminas, minerales, enzimas, antioxidantes, aminoácidos, ácidos grasos esenciales y fibra. “Es muy importante mantener una alimentación equilibrada, con una alta ingestión de vegetales frescos y evitar aquellos que actúan como supresores de la tiroides y estimulantes como azúcar, café y cigarrillo”, afirma.
La dieta se complementa con sueros metabólicos, que están cargados de aminoácidos como la tiroxina, la vitamina A y oligoelementos como el selenio. “Estos sueros ayudan a que el paciente tenga un metabolismo más rápido, a que esa tiroides responda en la producción de hormonas”, explica Botero.
Otro factor que juega un papel importante en el desarrollo del hipotiroidismo es el estrés por su efecto en las funciones químicas del organismo con el consiguiente desequilibrio. La recomendación es dormir ocho horas diarias y practicar ejercicios como el yoga, que ayudan a mejorar la respiración, fomentar la concentración y manejar el estrés adecuadamente.
Algunas terapias complementarias pueden contribuir al manejo del hipotiroidismo, como la hidroterapia iónica (pediluvio) para detoxificar y desintoxicar el organismo; terapias neurales celulares y el uso de factores autólogos (plasma rico en plaquetas) para combatir la flacidez, ya que -según Botero- el paciente con problemas de tiroides suele presentar deficiencia de colágeno.
“El hipotiroidismo es una enfermedad crónica, que no se quita pero que puede estabilizarse y manejarse con hormonas, conjuntamente con algunas terapias alternativas”, finaliza Botero.
Se suele culpar a la falta de fibra en la dieta y al alto consumo de comida ultraprocesada, pero definitivamente esta no es la única razón. Los oncólogos sospechan de cambios en la flora bacteriana pero aún no saben qué los causa
Según la nutricionista Bárbara Carreño, lo ideal es incluirlos en las principales comidas del día y complementarlos con carnes magras, pescados y frutos secos