Científicos han identificado un gen que podría ser el causante de esta adicción y podría ser la explicación del por qué hay personas que necesitan beber más café que otras.
El estudio fue desarrollado en diferentes poblaciones de distintas regiones de Italia. A través de esa población, los investigadores basaron su estudio por asociación de genomas, en el que examinaron y encontraron un gen llamado PDSS2 que puede jugar un papel importante a la hora de metabolizar el café. En el estudio publicado en Scientific Reports, los investigadores le preguntaron a más de 1.200 personas en Italia, cuántas tazas de café tomaban a diario. Estas respuestas, junto a los resultados genéticos, fueron comparados con otra población de 1.731 personas en los Países Bajos y encontraron que aquellas personas con más expresión del gen PDSS2 dijeron tomar menos café. Este gen es conocido por regular la producción de las proteínas que metabolizan la cafeína en el cuerpo, y en el estudio realizado reportaron que:
«La hipótesis es que las personas con más niveles de este gen metabolizan de forma lenta la cafeína y por eso es que toman menos café». Comenta Nicola Pirastu, autor de la investigación de la Universidad de Trieste en Italia. “Esas personas necesitan tomar menos para recibir los efectos positivos de la cafeína, como mantenerse despierto y despertarse menos cansado”
Este estudio no es el primero que relaciona los genes a una mayor propensión por consumir más café o menos. En octubre de 2014 un estudio analizó los genes de más de 120.000 bebedores de café y resultó que seis marcadores genéticos están asociados a la sensibilidad de las personas a la cafeína, según un reportaje en Time:
«Hasta cierto grado, el café puede prevenir ciertas enfermedades pero también predispone a otras”, comenta Pirastu. “Por eso, entender cuál es la causa de esto es muy importante”.
Asimismo, el café ha estado relacionado con una larga variedad de beneficios como la salud de las arterias, menor riesgo de diabetes tipo 2 e incluso se ha dicho que puede ser una potente fuente de longevidad.
Pirastu agrega que es una de las vías en el cuerpo que metaboliza la cafeína, también metaboliza algunos medicamentos y asegura que:
“Si conocemos el genotipo de este gen, podríamos explicar por qué hay gente que reacciona diferente con cierto tipo de drogas”, comentó.