Carlos Alvarado, ministro de Salud del gobierno de Nicolás Maduro, anunció el pasado 28 de febrero la llegada de 15 médicos palestinos que estarían en cuatro hospitales del país pero no especificó cuáles ni en dónde.
De éstos médicos no se conocen ni sus títulos, ni sus estudios. El doctor Carlos Prosperi, quien presta servicios en el Hospital Vargas, aseguró que en el centro hospitalario hay seis de éstos médicos trabajando.
“Ya venían llegando médicos palestinos que estudiaron en la Escuela Latinoamericana de Medicina y que hacían su reválida como médicos cirujanos en la Universidad Rómulo Gallegos”, explicó Prosperi al asegurar que es un proceso de que puede llevar entre seis meses y un año.
Éstos médicos palestinos no sólo llegaron ya al Vargas, sino que dos ya habrían operado y otros ya han puesto anestesia.
Una de las cosas que más preocupa a Prosperi es que no hablan español.
De los otros siete médicos se desconoce el paradero. Solo se sabía que algunos quedaron en el Hospital Materno Infantil de Macuto.
Para Prosperi el trasfondo no es otro que el político.
“Aquí no hace falta que traigan médicos. Aquí lo que hace falta es insumos”, dijo.
Otro aspecto de la llegada de éstos médicos palestinos es que, según asegura Prosperi, devengarían entre 1.500 y 1.800 dólares mientras que un médico venezolano percibe tan solo 6 dólares.
De hecho, según cálculos del diputado y economista José Guerra, un millón y medio de empleados públicos devenga solo 4,45 dólares mensuales.
“Sí es viable”, asegura el representante de los trabajadores de hospitales y clínicas de Caracas, Mauro Zambrano quien además agrega que sí tienen la fuerza.
Destaca que sería un un paro no sólo del sector público sino también del privado y aunque aclara que ya el sector Salud está prácticamente parado, esto sería una vía para “recobrar la democracia”.
En relación a la visita de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, Zambrano dijo que “la vamos a esperar y nos reuniremos con quién sea».
«Qué venga y visite los hospitales. Qué vea cómo se violan los derechos humanos y si se reclama, te meten preso. Qué vean que hoy mueren los pacientes en los hospitales y que se está violando el derecho a la vida pero que además, los trabajadores pasan hambre y son encarcelados”, explicó Zambrano.
En cuanto a la ayuda rusa anunciada por Maduro, Prosperi sostiene que “nunca vimos esa ayuda”.
Relata que, según la versión oficial, está ayuda se destinó para el Periférico de Catia y al Perez de León. Sin embargo, hay pacientes en el Periférico que necesitaban desde insumos para tratar la diabetes hasta tratamientos para la fibrosis quística y “no había nada. Una ayuda que no duró ni 48 horas porque así lo denuncian los propios pacientes”, dijo.
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