Venezuela forma parte de la selva más grande del mundo y en su territorio se puede encontrar una gran variedad de plantas comestibles que se pueden convertir en alternativas nutritivas para la alimentación
La exploradora Karla Brewer junto con Conbive ofreció un conversatorio para enseñarle a más de 60 participantes cuáles son las plantas comestibles que pueden encontrar en el país. Es así como el pasado 24 de agosto, D.O.C Bar Restaurant abrió sus puertas para que se llevara a cabo la iniciativa.
Esta actividad formó parte de la campaña #LaBiodiversidadQueSeCome que tiene como propósito promover la participación ciudadana para resolver problemas de promoción y desinformación sobre el conocimiento de alimentos alternativos. La idea es que las personas puedan descubrir a través de la biodiversidad nuevos elementos naturales que forman parte de la cotidianidad o del medio ambiente.
Drai Cabello, presidente de Conbive, comentó que la alianza con D.O.C era indispensable ya que ellos comprenden y forman parte de la misión de la organización.
“Nos aliamos con el restaurante D.O.C. porque ellos sirven la biodiversidad en sus platos. Su propuesta gastronómica respeta al medio ambiente, a las tradiciones y al productor”
De igual forma, afirmó que cuando descubrimos la ciudad, ésta se nos hace más grande, más hermosa y agradable. Asimismo, cuando conocemos la naturaleza de Venezuela exaltamos nuestro gentilicio.
El conversatorio estuvo guiado por Karen Brewer, exploradora e hija de Charlie Brewer. Al comenzar la actividad, la ponente explicó el contexto dentro del cual la sociedad venezolana se encuentra inmersa.
“Venezuela copió el sistema industrializado europeo y americano. Las personas no están acostumbradas a comprar lo que nunca han probado o lo que pocos conocen”.
Además, señaló que Venezuela forma parte de La Amazonia, la selva más grande del mundo. Por lo tanto, en gran parte del territorio venezolano se pueden encontrar más del 80% de las plantas alimenticias que crecen en dicha selva. Sin embargo, el país no las aprovecha.
“Si queremos salvar el medio ambiente tenemos que comenzar por trabajar en descubrirlo, comprenderlo y entenderlo en su totalidad”, compartió
A su vez, la tendencia saludable ha contribuido a la promoción de la alimentación a través de plantas y frutos. Este movimiento ha despertado la curiosidad en las personas por encontrar nuevas alternativas más nutritivas y con mayor cantidad de propiedades.
Para cerrar el conversatorio, Drai señaló la importancia de este proyecto e invitó a los participantes a que se unieran a la iniciativa, ya que las plantas comestibles pueden ayudar a enfrentar algunas situaciones por las que pasa Venezuela.
“Hoy en día existen dos problemas fundamentales: la escasez y las áreas degradadas. Para superar estas dificultades podemos recurrir a soluciones que se remontan a la época de nuestros abuelos. Con el ecoturismo podemos promover el desarrollo sustentable y ayudar a restaurar los paisajes naturales que se encuentran en peligro”
Al finalizar el conversatorio, el restaurante ofreció varios bocadillos elaborados con plantas alimenticias, entre los cuales podemos mencionar: pira salteada en mantequilla de hierbas y vino, galleta de castaña con queso de cabra y mermelada de pimentón, croqueta de pira con salsa de ají dulce margariteño y casabe con confitura de flor de canela del estado Vargas.
La Yerba Caracas en cada esquina de la ciudad
También conocida como Amaranto o Pira, la Yerba Caracas se remota a la época de la Colonia. Los nativos se alimentaban de ella para brindarles a sus cuerpos los nutrientes y la energía necesaria para combatir a los españoles. Se dice que el nombre de la capital de Venezuela proviene de esta hierba.
La pira se puede encontrar en casi todas las calles de la ciudad ¡solo tenemos que identificarla! Y la podemos utilizar para preparar ensaladas, infusiones, pan y cotufas.
¿Cómo sabemos si una planta es comestible?
Durante el conversatorio, Karen Brewer nos dio algunos tips para descubrir nuevas plantas comestibles y no intoxicarnos en el intento. Para ello debes tomar en cuenta que:
1- No debes probar plantas con savia lechosa, normalmente no son comestibles.
2- Primero debes tocar la planta y esperar unos minutos para ver si genera algún tipo de reacción alérgica en la piel. Si esto ocurre, te has encontrado con una planta venenosa.
3- Posteriormente, debes colocar en tu boca o probar un pedazo de la hierba. Si ocurre algún tipo de reacción alérgica o sientes algún hormigueo, la planta o el fruto no es comestible.
Coordenadas
La moringa oleífera o malunggay es un regalo milagroso que nos envía el Himalaya a la humanidad
Para quienes quieran celebrar el día del padre fuera de casa, el restaurante D.O.C. ofrece un menú muy especial en su día
