Gente del oficio

Río Cacao, para los amantes del chocolate en el oriente venezolano

Rio Caribe es conocido por la belleza de sus paisajes, lo alegre y servicial de su gente y su aromático cacao, trinitario y forastero que concentra el 80 por ciento de la producción en la zona que se extiende a poblaciones como El Pilar, Yaguaraparo, la zona montañosa Quebrada de Mono, donde se encuentran comunidades como Auraco, La Hierba, Las Conotas, Cangrejera, Periquito y Papelón, entre otras, en las que se pueden encontrar pequeños y medianos productores que han heredado de padres y abuelos este legado que mantienen, con métodos que datan desde la colonia Una pequeña casa blanca con paredes de bahareque y techos de madera se ha convertido, desde principios de este año, en un gran motor para el emprendimiento, la capacitación y el encuentro entre productores, pobladores interesados en sacar el máximo provecho a un producto con el que nacieron y han crecido, así como profesionales en el área, un sueño que cristalizó nuestra embajadora del cacao, María Fernanda Di Giacobbe en el oriente del país.

Fotos: @monagasgourmet
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Hace poco más de un año, durante un almuerzo en el que compartía con María Fernanda (y en el que casualmente le anunciaron se encontraba entre las 20 finalistas a optar por el Basque Culinary Center), me dijo “estoy muy ilusionada con este proyecto en Río Caribe que nos permitirá mejorar todos los procesos en torno a la producción del cacao, espero poder ganar este reconocimiento para poder pagar los equipos, tal y como se lo aseguré en ese momento, y así sucedió.

Diógenes Sánchez e Izamar Zabala son dos grandes apasionados del cacao que se han encargado de haber convertido a Río Cacao el lugar de encuentro para los amantes del cacao y el chocolate, “recibimos entre tres y cuatro productores a la semana, cada vez son más los que se acercan a este espacio en busca de asesoría, orientación, en busca de talleres o capacitación que les permita mejorar sus procesos”.

Izamar recibió una capacitación intensiva en @cacaodeorigen de la mano de María Fernanda, Chole Doutre Roussel, Diego Ceballos y todo el equipo en el que perfeccionó sus conocimientos, “Los productores nos traen sus semillas para que realicemos la evaluación correspondiente, hacemos una selección y luego de realizar un corte transversal, determinamos diversas características de acuerdo a una metodología con la que trabajamos”, comenta.

Este simple proceso les permite conocer incluso si se ha realizado un adecuado proceso de fermentado del grano y se requiere que al menos, un 25% de la muestra este óptima para pasar al siguiente paso, tostar y descascarillar las semillas de cacao, conchar, temperar, hasta elaborar la tableta y finalmente empacarla.

Estos productores cuentan con patio de secado, oficina con aire acondicionado, taller y cuarto con cajas de fermentación en el que se desarrolla por completo el proceso de investigación así como la elaboración de tabletas bean to bar.

“Reconocen y valoran el trabajo que hacemos desde la siembra”

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Carlos Luces productor de la Hacienda San Eloy, ubicada a pocos minutos de Río Caribe se acercó hasta las instalaciones de Río Cacao con el objeto de solicitar asesoría y lograr que se revalorice aún más el fruto del trabajo que se realiza desde hace más de tres generaciones en su familia: “mi abuelo, mi padre y yo somos gente de cacao, estudié ingeniería agronómica en la UDO Monagas y luego de graduarme me vine a trabajar en la finca familiar”, comenta con orgullo.

Luces reconoce que no hay tradición en torno al fermento del cacao en la zona: “no hay un diferencial significativo en torno al precio a pagar por un cacao corriente o fermentado, sin embargo, esta iniciativa que representa Río Cacao me motiva a mejorar los procesos para lograr que mi nombre aparezca en una tableta, eso representa un reconocimiento importante, será la mejor manera de rendir un merecido homenaje a mi padre y abuelo, además que mi producto final tendrá un alto estándar de calidad y será conocido más allá de nuestras fronteras a través de una tableta. Antes solo veíamos cómo se llevaban el saco de cacao pero no conocíamos los resultados del producto final, es decir donde terminaba; ahora podemos ser parte de todo el proceso”.

Por su parte, Pedro Luna, productor y representante de Luna Cacao junto a los muchachos de @chamoschocolatier participó en el proceso de elaboración de una tableta con sus granos: “Es muy emocionante ser parte de todo el proceso para llegar finalmente a una tableta, esto nos anima a seguir trabajando para mejorar aún más y ofrecer además del mejor cacao, el mejor chocolate del mundo”, agrega.

Capacitar es la clave

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María Fernanda Di Giacobbe dijo durante su visita a Maturín, a propósito de su participación en el evento, con motivo del primer aniversario de @monagasgourmet: “En la capacitación está la clave para lograr que en Venezuela podamos ofrecer un cacao premium, pero también el mejor chocolate del mundo…”, es así como gracias a la invitación de amigos y expertos en el área se han desarrollado en los espacios de Río Cacao y la Posada Caribana, cursos y conversatorios que buscan ofrecer herramientas para aprovechar al máximo, el cacao y el chocolate.

Durante la tercera semana de junio junto a @chamoschocolatier se realizaron dos cursos de bombonería básica para emprendedores en las que Yahvé Herrera, Jorge Escobar y Martín Chópite le brindaron a casi 50 personas, la oportunidad de aprender sobre el arte de la bombonería, así como el uso de ingredientes como el jovito, el ají y otros frutos que sirven como base para el relleno. Además, ofrecieron una tarde de diversión a niños especiales de Río Cacao, quienes aprendieron a elaborar chupetas de chocolate, temperar y rellenar bombones.

Los jóvenes chocolateros también compartieron sobre su experiencia personal en el desarrollo y crecimiento de su empresa en una charla titulada Emprendimiento en tiempos de oportunidades, con la que buscan motivar a los Río Cariberos a desarrollar ideas de negocios exitosas en torno al cacao.

“La población nos pide talleres, cursos, la receptividad ha sido increíble, seguiremos realizando alianzas con cocineros, chocolateros, periodistas, emprendedores para ofrecer alternativas tendientes a fomentar el conocimiento no solo de nuestro cacao, sino de los sabores y saberes de la cocina venezolana, queremos que Río Cacao sea un punto de encuentro entre todos los que aman a Venezuela, su cacao, sus sabores y su cultura”, recalcó Diógenes Sánchez.

Tabletas con identidad

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Río Cacao ya cuenta con un total de cinco tabletas: Carenero 75%, naranja, café, sal de Araya y Río caribe al 75% que están a la venta en Caracas: en Cacao de Origen y Secadero 1/Hacienda La Trinidad – Kakato, El Buscón y Sala TAC/ Trasnocho Cultural – Licores Mundiales y Madame Black/ Las Mercedes – Lico teca/ La Castellana – Arte Canias, Café Arábica, Fresado/Los Palos Grandes – 7 al Cubo/ Los Galpones – Centro Cacao/ Aeropuerto Internacional de Maiquetía y en Margarita: – Tecnibooks y El Langar de Sumito.

Si deseas conocer más de cerca las actividades y productos desarrollados en el laboratorio escuela Río Cacao puedes contactarlos a través de @cacaodeorigen en Instagram.

La Venezuela que lucha a través del cacao

Esta experiencia en Río Cacao es digna de emular pues convergen sin distingo, ni mezquindades con la finalidad de aprender y ofrecer un mejor producto, trabajadores de la tierra, profesionales de diversos ámbitos ligados al área del cacao y la gastronomía así como cultores, en un espacio en el que se muestra el compromiso de trabajo de nuestra gente en pro de lograr una mejor Venezuela, la que anhelamos, en este caso con aroma a cacao, un fruto de primera, bien fermentado, con procesos post cosecha al que se le dé el justo valor, luego del esfuerzo y trabajo.

María Fernanda dijo en una entrevista concedida a El País de España “El Cacao puede ser más importante que el petróleo en la historia de Venezuela” y así se respira en Río Cacao, Cacao de Origen, proyectos llenos de compromiso social, humanidad y humildad, ejemplo de tenacidad, fuerza y voluntad.

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