"Pareciera que el Gobierno nos olvidó porque piensa que vamos a morir"

Una de las manifestaciones se realizó a las puertas del hospital infantil JM de los Ríos, donde familiares denunciaron fallas en los servicios y la infección de 17 niños por la contaminación de la planta de hemodiálisis que utilizan para tratar sus problemas renales.

En tanto, una marcha de pensionados en el centro de Caracas fue aprovechada por pacientes oncológicos de la tercera edad para manifestar a periodistas que no cuentan con medicinas, comida ni los equipos idóneos para cumplir con su tratamiento.

«Pareciera que el Gobierno nos echó al abandono porque piensa que vamos a morir pronto», soltó un paciente del Oncológico Luis Razetti de Caracas, que sufre cáncer de mama.

«En el Hospital Oncológico no esta funcionado la bomba de cobalto para las gammagrafías óseas (estudio con el que se diagnostica cáncer de los huesos o metástasis). El centro tiene seis meses con la emergencia trancada».

La protesta de los familiares de los pacientes del JM de los Ríos obligó al director de ese centro, Victor Siegert, a intervenir. Dijo ante periodistas que la ministra de Salud, Antonieta Caporale, ya tiene un «diagnóstico y la solución» para los diversos problemas que enfrenta el hospital.

«No es que no se ha estado haciendo (…) En poco tiempo, por lo menos vamos a tener la solución inmediata para la operatividad de la hemodiálisis y el servicio de nefrología, el mantenimiento se hará este sábado y domingo para afectar a un menor número de pacientes», sostuvo.

Sobre el agua contaminada que los niños beben en el hospital, el funcionario afirmó: el agua contaminada la tiene usted en su casa y hasta en los hoteles, es algo por fuera de la operatividad de las autoridades de cualquier hospital (…) Tenemos seis tanques de agua a los que se les ha hecho limpieza».

El director del JM de los Ríos invitó a dos medios presentes en la manifestación a ingresar a las instalaciones de la institución para verificar su estado. Minutos después ordenó su desalojo porque ingresaron en espacios que están prohibidos, según denunciaron los manifestantes.

Exigiendo soluciones inmediatas, las madres denunciaron el precario estado de este centro infantil, uno de los más importantes de la capital: “Mi hijo es paciente renal crónico, se está haciendo hemodiálisis actualmente. Tiene dos bacterias en su cuerpo, en el catéter y en la sangre”.

«Los baños no funcionan, hay que bañarlos con agua fría (…) Los niños se nos están muriendo aquí porque no hay medicamentos», fue parte de lo que denunciaron las madres.