Vida sana

¿Por qué te pican tanto los ojos?

Si eres de las personas que se rasca los ojos sin parar, puede ser que padezcas de alguna alergia ocular. Pero, ¿cómo es eso? Aquí te contamos más 

Foto: www.ciudadanosuni2.org| Texto: Sanitas Venezuela
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La alergia ocular es una enfermedad del ojo producida por una reacción inmunológica que genera ganas de frotarse y lagrimeo. Este padecimiento es causado por un trastorno donde el paciente es más susceptible a generar respuestas inflamatorias y alergias a nivel ocular por la presencia de los alérgenos que se encuentran principalmente en los hogares y en el ambiente.

La alergia es una respuesta inmunológica del cuerpo contra algo que lo considera extraño. Esto significa que cuando el contacto con alérgeno ha sido de manera frecuente, el cuerpo genera una memoria y emite una reacción inmediata contra el ente. A nivel ocular, se pueden detectar cuando una persona presenta picazón o ganas de frotarse los ojos con frecuencia, lagrimeo y enrojecimiento de los ojos.

Existen cinco tipos diferentes de alergia ocular y es importante distinguirlas porque cada enfermedad es distinta por lo que es necesario administrar el tratamiento adecuado para poder combatirlas.

1. Conjuntivitis Alérgica: es una inflamación de la conjuntiva, membrana delgada que cubre la parte interna de los párpados y la superficie ocular. La estacional y la perenne son leves y se ven con mayor frecuencia en Venezuela. Estos tipos no producen ninguna complicación visual y son generadas por los alérgenos que están en las casas como el polvo, los ácaros de los animales y caspa de animales. Los pacientes con estas alergias pueden quejarse de presentar picazón en el ojo durante todo el año y sensibilidad a la luz.

2. Queratoconjuntivitis: es la inflamación de la córnea y la conjuntiva. La queratoconjuntivitis vernal la padecen principalmente los niños y en la época de verano, producen lagrimeo, pesadez de los párpados, intolerancia a la luz y secreción viscosa. Por su parte, la queratoconjuntivitis atópica es una manifestación de la atopia, donde el sistema inmune genera más anticuerpos de lo habitual en respuesta a un alérgeno. En la mayoría de los casos aparece en la adultez y se puede observar por la hinchazón y enrojecimiento de la conjuntiva y lesiones en los párpados.

Estos dos tipos pueden llegar a afectar la cornea, disminuyen la visión del paciente hasta llegar incluso a la ceguera. En muchos casos, las personas necesitan cirugía para poder mejorar los síntomas y complicaciones. Por esta razón, es fundamental acudir al oftalmólogo y a los controles regulares para poder aplicar el tratamiento de esteroides e inmunosupresores.

3. La Conjuntivitis Papilar Gigante se presenta expresamente en las personas que utilizan lentes de contacto blandos y se caracteriza por presentar papilas gigantes en la conjuntiva, generando picazón, lagrimeo, secreción mucoide, visión borrosa y ojos rojos.

“La alergia es algo que no se cura pero se controla y, si la persona siente picazón frecuente en los ojos es de suma importancia que acuda al oftalmólogo para poder evitar complicaciones futuras. Con las pruebas se pueden determinar cuáles son los factores que producen la alergia para eliminarlos de la vida del paciente y poder ayudarlo con la mejoría de los síntomas”, indica la Dra. Dianela Porras.

La Dra. Porras comenta que por ejemplo si un paciente se muestra alérgico al polvo se le indica que debe sacar de su cuarto cualquier objeto que lo acumule como libros, alfombras, cortinas, entre otras medidas de prevención para evitar las reacciones alérgicas.

Asimismo, las personas deben ser vistas con regularidad (cada seis semanas) para cambiar los antialérgicos recetados y colocarse lágrimas artificiales sin preservantes cuatro veces al día y antialérgicos tópicos de acción dual.

Es vital destacar que gran parte de la población (aproximadamente el 40%) es propensa a presentar este tipo de alergias y los que tienen predisposición alérgica son más vulnerables a desarrollar estas enfermedades tanto a nivel ocular como en otra parte del cuerpo. Por este motivo, es importante la prevención para evitar que los desencadenantes de alergias estén en contacto frecuente con la persona para ayudarlo a gozar de una buena salud y bienestar.

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