7 trucos de cocina para comer más saludablemente

La forma cómo se preparan los alimentos puede influir en la manera cómo afectan al organismo. Por ejemplo, te puedes comer dos purés de papas, hechos con los mismos ingredientes y las mismas cantidades, pero uno subirá más el índice glicémico que el otro. Y todo por la forma como se cocina y que explicamos más abajo.

Estos y otros trucos de cocina los compartió el médico cirujano y cocinero Wartan Keklikian durante el evento «Conversando saludable», que se efectuó el 28 de febrero en la cocina de The View Caracas, en Las Mercedes. Los resumimos a continuación:

1. Para hacer puré, hierve las papas con cáscara. Para que el cuerpo lo digiera mejor y no suba la glicemia, lo ideal es cocinar la papa con su cáscara y luego que esté blanda, pelarla y hacerla puré. Hervirla con cáscara evita que la pulpa se llene de demasiada agua, lo que activa el almidón. Lo mismo vale para las zanahorias y otros tubérculos.

2, La papa cocida, mejor del día anterior. Y si se trata de papa cocida, es mejor prepararla el día anterior y guardarla en la nevera. Eso también hace que sea más saludable para el cuerpo, no importa si después se calienta para comer.

3. Pasta y arroz al dente… y no por gusto. Es algo similar al fenómeno de la papa: mientras más agua, más almidón suelta y en el cuerpo se transforma en mayor índice glicémico.

4. Los huevos, al menos dos minutos. Para el organismo no hay diferencia entre comer huevos pochados, sancochados o preparados de alguna otra forma siempre y cuando se cocinen al menos dos minutos para eliminar cualquier microorganismo, explica Keklikian. Sin embargo, apunta que la clara, mientras menos cocida esté, es más digerible para el cuerpo.

5. Al hacer caldo de pescado. El médico recomienda remojar en agua con sal, y al menos una hora, las cabezas y espinazos de pescado que se usen para preparar caldos o fondos. Esto es para que suelten todas las impurezas que suelen tener.

6. ¿Aceite de oliva para sofreír? Sobre el aceite de oliva circulan algunos mitos como, por ejemplo, que no se puede calentar. Eso no es cierto. Mientras no se exponga demasiado al calor (igual que otros aceites), se puede utilizar para sofreir alimentos. Además, el aceite de oliva contiene muchos antioxidantes y eso, precisamente, lo protege también contra los radicales que se pueden desarrollar ante altas temperaturas.

6. Fruta con un poco de grasa o proteína. Cuando se dice «grasa» se refiere a algún alimento que tenga lípidos. Pueden ser grasas buenas, como el aguacate o los frutos secos, o un trozo de queso o alguna proteína. Así que, si vas a comer frutas, súmale un trocito de alguno de esos alimentos. La hace más digerible y disminuye el índice glicémico.

Lea también: