El fogón creativo

El golfeado: de bastimento a merienda golosa

La suave masa enrollada sobre sí misma guarda la apetecida combinación de dulce y salado que sedujo a los viajeros, que en el bucólico valle de principios del siglo XX emprendían viaje en el ferrocarril

golfiao
Foto cortesía de @elfogoncreativo
Publicidad

El golfeado o golfiao es uno de esos amasijos anclados en la memoria del venezolano, elaborado con una masa enriquecida, su sabor se redondea con la adición de papelón y queso. Rafael Cartay, en el libro Entre gustos y sabores (Caracas, 2010), intenta zanjar la perenne discusión sobre el origen de la preparación.

Señala que existen dos historias en torno a la creación del golfeado, una que lo ubica en Petare y otra que asegura su origen en Los Teques. En ambos casos se trata de poblaciones ubicadas en el estado Miranda, y termina vinculándolo con los panecillos de origen portugués o con los bollos dulces que se elaboran en las Islas Canarias en época de carnaval.

golfiao golfeado
El golfiao o golfeado toma su nombre del caracolito que aparece en las plantas de café. Fotos cortesía de @elfogoncreativo

El golfeado de la Duarte

Fran Suárez, panadero y petareño de pura cepa, le sale al paso al investigador afirmando que fue en la Panadería Central, propiedad de la familia Duarte en su pueblo natal, donde se elaboró el dulce pan por primera vez.

Agrega que el nombre se relaciona con los extensos cafetales de la zona, pues “al café le nace una semilla en forma de caracol y a ésta los campesinos la llamaban ‘golfiao’, y los clientes pedían a la señora María Duarte: deme eso que parece un golfiao”

Ubicada muy cerca de la estación del ferrocarril Petare-Santa Lucía, la panadería de los Duarte poco a poco se fue haciendo popular entre los viajeros y, según Fran, lo llevaban para el camino como un dulce bastimento o como regalo para familiares y amigos que, en muchos casos, nunca habían salido de sus ciudades o pueblos.

golfiao golfeado
Rafael Briceño Sierralta

Sea de Petare o de Los Teques, esta preparación exige el adecuado trabajo del gluten de la harina de trigo porque no debe ser un ponqué pero tampoco un pan dulce. Según las clasificaciones de algunos especialistas es una forma de bollería, lo que lo hermana con los cinnamon rolls o los pasteles daneses.

La receta, con variaciones, se ha ido extendiendo por todo el país manteniendo su popularidad, tanto que el chef ejecutivo de Granier apenas llegar a Venezuela fue a visitar panaderías de Caracas para probar los golfeados de los que tanto le hablaban.

Coordenadas

Fran Suarez: @golfiaodepetare2

Fotos cortesía de @elfogoncreativo

Publicidad
Publicidad