El origen del croissant: una guerra, una campana y un valiente panadero
El primer croissant se elaboró en Austria, alrededor de 1636. Posteriormente se popularizó en Francia, que perfeccionó la técnica del hojaldrado. En Caracas, la pastelería Mémé ofrece varias opciones para celebrar el Día Mundial del Croissant
El croissant, ese pan de hojaldre que ahora alegra tantos desayunos, nació en Austria, durante una guerra. Cuenta la historia que, en 1683, un panadero vienés alertó a la población sobre un ataque del imperio otomano. Lo hizo batiendo su campana antes de la hora habitual, aunque eso podía costarle la vida. Los austriacos se prepararon y vencieron. En honor a esa victoria, y a la acción del panadero, crearon un pan con forma de media luna, símbolo que usaban los enemigos. Es decir, se «comían»a ese imperio.
Con los años, el kipferl, como llaman en Austria al croissant, se hizo popular en Francia, que perfeccionó la receta y le añadió el ingrediente favorito de la cocina gala: la mantequilla. Así, lo hicieron hojaldrado y le dieron su textura característica y esa permanencia untuosa en boca.
Mémé es una pastelería y cafetería de inspiración francesa que fundó el chef y maestro hojaldrero Eric Martin, descendiente de galos.
Con 17 meses de puertas abiertas, en Mémé se puede disfrutar de una amplia variedad de croissants con rellenos dulces y salados para toda ocasión, además de otras opciones en el menú. Hasta la fecha se han elaborado más de 100.000 croissants servidos en tienda y también a la venta en otros restaurantes y cafeterías en Caracas que lo encargan.
Para celebrar el Día Internacional del Croissant han preparado distintas formas de saborearlo:
● Degustación de croissants: simple, pistacho, almendras y Nutella medianos. La caja de los cuatro en 12 dólares. ● El croissant gigante de 30 cm para compartir con rellenos a elegir. De 17 a 22 dólares. ● Croissant Coquette, edición especial. 6 dólares
● Croissant Roll, golfeado hojaldrado y helado con barquilla de croissant. De 5 a 6 dólares.
La historia de Eric Martin
Eric Martin lleva en su ADN la pasión por la panadería. Incluso en los tiempos más difíciles del trigo en el país, se atrevió a aprender sobre el arte de la panadería gracias al apoyo de «la mémé«, su abuela materna, y en honor a quien bautizó su pastelería.
Tras formarse en Caracas en panadería y especializarse en masas hojaldradas en España, Eric regresó a Venezuela con un sueño: crear un espacio donde el croissant fuese el protagonista. Luego de establecer su taller en dos lugares a la tercera fue la vencida, así nace el concepto de Mémé by Eric Martin.
Eric también se ha dedicado a la formación, han pasado más de 350 alumnos de varios lugares del país en los últimos 4 años, desde entusiastas hasta equipos de panadería y negocios gastronómicos.
«Los talleres para la elaboración de masas hojaldradas son una forma de elevar el conocimiento del croissant en Venezuela. No solo queremos que la gente disfrute de este clásico de la bollería, sino que también entienda el proceso de elaboración y la técnica detrás de él. Queremos que los venezolanos puedan encontrar croissants de calidad en sus lugares favoritos, hechos con pasión y conocimiento”, asegura Eric Martin.
A través de un concurso de Instagram, El Cachito de Caracas seleccionó a sus "jueces de calle", para que probaran y evaluaran cachitos de varias panaderías en Caracas
En solo 3 años, este concurso ha pasado de 11 panaderías participantes a 310, y se ha fortalecido integralmente. Este año, la final será en vivo y con público, el 4 de mayo en Altamira
En tres años, Tahyra Flores ha hecho de Panes Tati una marca consolidada, con más de 20 productos en el portafolio, la mayoría elaborados con masas madre. Se ha especializado en bollería italiana y española como la focaccia, el aro cantábrico y el nuevo centeno light