La reconocida pastelera venezolana, radicada en España, establece una alianza con la heladería artesanal Fragolate para crear una línea con su firma y ofrecer sus postres de autor
Los recuerdos de la infancia se convierten en emociones que acompañan la vida entera y que, excepcionalmente, evolucionan hacia algo tangible. La repostera venezolana Angélica Locantore logra esta metamorfosis, y transforma las memorias felices en un postre lleno de técnicas y sabores.
La Colonia Tovar es el dulce que retrata los aromas, gustos e imágenes que Angélica Locantore mantiene en su hipocampo y refiere a los viajes que hacía, de niña y con su familia, a este enclave alemán en las montañas de Aragua, a poco más de una hora de Caracas. Lo primero que viene a la mente, cuando retrocede a esa época, son las cajas de frutas que su papá compraba a orillas de la carretera, incluso antes de llegar al pueblo.
Angélica ahora recurre a las técnicas de repostería que aprendió y fortaleció en la Escuela Hoffman y en el restaurante Celler de Can Roca, donde trabajó como jefa de pastelería, para crear La Colonia Tovar. Dentro de un «guacal de madera», hecho con chocolate de leche y chocolate de blanco El Rey, encierra bizcocho de almendras, ganache de chocolate blanco, compota de frutos rojos, crema de limón y una corona con frutas frescas de temporada, en su estado natural: fresas, moras y uchuvas.
«Tuve que reeducarme en los sabores, pues aquí las fresas y frambuesas son más ácidas que en España, igual que el limón», comentó la pastelera de 35 años durante el evento de presentación.
En resumen: en ella, la memoria gustativa se hace, literalmente, gusto.
Para armar el guacal, la pastelera tempera 6 piezas de chocolate por separado y las ensambla. El tono de madera lo logra fusionando los dos tonos de chocolate hasta tener el marrón deseado y «pintar» el guacal. Luego procede a agregar los distintos postres. Angélica demora 12 minutos tan solo en armar el dulce, y eso teniendo todo listo en la mesa.
La Colonia Tovar es uno de los postres creados por Angélica en sus recientes visitas a Venezuela, pues ella reside en España. Primero lo ofreció en la pastelería Mémé, en Los Palos Grandes, y ahora lo lleva a la vitrina de la heladería artesanal Fragolate, ubicada en el centro comercial San Luis en El Cafetal, según corroboró Pedro Dahdah, socio de la heladería junto a su hermano Ramón.
Esto, además, representa la incursión de Fragolate en el segmento de pastelería pues, hasta ahora, estaban enfocados en helados, de los que cuentan con un amplio menú, incluidos sabores amazónicos.
Angélica y Fragolate establecieron una alianza para ofrecer los postres de la reconocida pastelera y, además, sumar a su menú, helados con el sello Locantore.
Para anunciar la alianza y presentar el nuevo helado, convocaron a un grupo de invitados, periodistas y relacionados con la gastronomía a su tienda en el centro comercial Valle Arriba.
El primer sabor que forma parte de la alianza Fragolate by Locantore es de chocolate de leche al 37% de El Rey, marca venezolana aliada de la pastelera, con avellanas garrapiñadas, praliné de almendras y coronado con una trufa de chocolate oscuro que tiene la particularidad de que tiene pequeñas burbujas internas que estallan en la boca.
El postre recuerda un poco al emblemático Toronto y, aunque la pastelera no lo dijo, es probable que también refleje uno de sus recuerdos de infancia y de las golosinas que disfrutaba.
Los postres de Angélica se venderán exclusivamente en la tienda Fragolate del centro comercial San Luis, planta baja.
Los helados Fragolate by Locantore estarán disponibles en las tiendas de San Luis y Valle Arriba Market Center.
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La chocolatier venezolana Angélica Locantore, distinguida con el segundo lugar como Maestra chocolatera de España al conquistar el Trofeo Lluis Santapau 2019, impregna de creatividad la bombonería de la temporada. Su propuesta es una ingeniosa combinación de sabores evoca emociones y memorias a través de la mezcla de sabores autóctonos, elementos de la cultura venezolana, tradiciones y la delicada cadencia que logra con chocolates El Rey y los destilados venezolanos, Para ella Venezuela sabe a ron, sarrapia y mango
